Conductores de motocarros forman caos en el centro de Soacha

Total caos se vivió en la tarde de este viernes por la vía Indumil entre Parque Campestre y el centro de Soacha. 25 familias propietarias de motocarros reclamaron el derecho al trabajo y exigieron respuestas de la administración municipal frente a la petición de conformar una empresa con quienes se dedican a este trabajo.


La manifestación partió de la urbanización Parque Campestre y las familias se desplazaron por la vía Indumil hacia la Alcaldía Municipal formando un caos total en el transporte. Unas 80 personas pertenecientes a 25 familias que se dedican a trabajar en los motocarros exigieron que los dejen trabajar.

“Estamos luchando por el derecho al trabajo y rechazamos el monopolio que hay en Soacha, no nos dejan salir adelante decentemente, persiguen a los motocarros sabiendo que lo único que hacemos es prestar un servicio a la comunidad”, dijo Fernando Martínez, propietario de un motocarro.

“No nos quieren dejar trabajar y lo único que hacemos es prestar un servicio, como ellos lo llaman informal, tampoco nos quieren dejar legalizar, tratamos de hacerlo pero nos dicen que por orden de la alcaldía no hay permisos para formar empresas de transporte, que porque llega el SITP y con ese cuento nos tienen desde el año pasado”, agregó Martha Rodríguez, residente en Parque Campestre.

Los manifestantes argumentaron que están haciendo la gestión para crear una empresa pero que la Dirección de transporte les niega todo. Además mostraron su molestia porque no hay claridad frente a la petición y todo se ha vuelto un ir y venir, pero a ciencia cierta nadie les ha explicado cuál es el futuro de estas personas.

“Somos 25 familias que dependemos del trabajo que hacemos. Todos vivimos en Parque Campestre donde prestamos el servicio, le estamos facilitando la salida a la gente porque el transporte no es suficiente para la cantidad de personas que vivimos allí”, puntualizó Martínez.

A pesar del caos, en ningún momento se bloqueó la vía. Sin embargo los manifestantes marcharon muy lentamente y por momentos se detuvieron en uno de los carriles, lo que imposibilitó el flujo de vehículos.

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