Transportadores de Soacha y Sibaté acordaron agenda para este jueves
Cerca de 20 transportadores entre propietarios y conductores de diferentes empresas que prestan servicio en el corredor Soacha – Bogotá se reunieron en la mañana de hoy para socializar las dificultades que han tenido después de la llegada del servicio de Transmilenio y organizar propuestas para la reunión que sostendrán mañana a las cuatro de la tarde con las autoridades de tránsito del departamento y la nación.
Antes de comenzar la reunión, en el centro comercial Unisur, la zona fue custodiada por hombres del ESMAD, a pesar del anuncio de los transportadores de no realizar protesta alguna.
Son tres los puntos principales que reclaman los transportadores que prestan servicio en el corredor de Bogotá -Soacha – Sibaté y viceversa.
– Una primera afectación es la aplicación de la Resolución 003 de 2014.
– En segundo lugar, la tabla de valores de chatarrización no ha sido clara y se especula que está por valores inferiores a los que se tienen en Bogotá.
– Por último, los transportadores manifiestan que la presencia de piratería está afectando notablemente al gremio.
«Hace diez días llegamos a unos acuerdos y hasta el momento no nos han cumplido nada. Ayer en la tarde cuando vieron que íbamos a hacer cese de actividades ahí sí nos convocaron a reunión y nos solicitaron que no hiciéramos ningún tipo de protesta. Vamos a ver, lo importante es que nos cumplan, si no es así, la situación será más crítica y afectará finalmente a todos los usuarios”, expresó Armando Salgado, uno de los líderes de los transportadores de Soacha.
El gremio también expresa inconformidades, no tanto por la llegada del Transmilenio al municipio de Soacha, sino por la falta de organización y directrices por parte de las autoridades municipales hacia el gremio. Varios conductores manifestaron gran afectación económica por la presencia del sistema masivo de transporte, que es utilizado ahora por gran parte de los soachunos.
Ferney Lasso, propietario de un vehículo de transporte público, explicó: «Hemos tenido una afectación muy grande con la llegada de Transmilenio, no nos aclararon cómo íbamos a funcionar u organizarnos. No nos explicaron si nos compraban, si nos uníamos al sistema o qué iba a pasar con nosotros».
No sólo Transmilenio los afecta económicamente, los transportadores consideran que la aplicación de paraderos cada 1500 metros en Bogotá también incidirá bastante en sus ingresos.
«Por ejemplo, en la ruta San Rafael el paradero queda cinco cuadras antes del Hospital de Keneddy, si una persona va con una urgencia a este lugar y nosotros paramos en el Hospital, nos podemos ganar un comparendo; el siguiente paradero es en la avenida Boyacá. El usuario preferirá bajarse y coger otro transporte o caminar. Nos han dicho que no podemos recoger usuarios en Bogotá y que sólo lo debemos hacer cada 1500 metros y la gente no sabe esto, no está avisada», manifestó Fernando Leuro, propietario de un bus colectivo.
El gremio considera que el derecho al trabajo se está vulnerando ya que de cada carro se suplen hasta tres familias, sin contar con los empresarios, despachadores y otras personas que viven del transporte público. Por lo pronto se espera que en la reunión de mañana se puedan llegar a acuerdos que beneficien a los usuarios, transportadores y la movilidad entre los dos municipios y la capital de la república.
Siga a Periodismo Público en Google News. Suscríbase a nuestro canal de Whatsapp