Los efectos de la Consulta Anticorrupción en Soacha
Las Consultas populares nacieron con el pacto constitucional del 91 bajo la promesa de construir una democracia de carácter participativa, y como instrumento para que la ciudadanía se pronunciara directamente sin la mediación de los políticos. En los últimos años este mecanismo se ha probado en el terreno local en temas vinculados al modelo minero-extractivista.
En ese escenario han sido las comunidades que han potenciado sus procesos organizativos en defensa del agua y los páramos. Ya son nueve municipios que han logrado detener con sus votos, y sus acciones de protesta, el curso de importantes proyectos mineros que ponían en peligro, entre otros aspectos, el equilibrio ambiental de los ecosistemas de Páramo.
Por primera vez fuimos a las urnas a una Consulta popular de carácter nacional a manifestarnos contra uno de los asuntos –junto a la violencia- que mayor responsabilidad tienen con el atraso y la desigualdad social: la corrupción. Sonados han sido los escándalos, y las frases altisonantes de nuestra clase política, que por sus excesivos privilegios constituyen una de las mayores vergüenzas de nuestro país. Por eso la lucha contra la corrupción no es un asunto de quienes no quieren reformarse, sino de la ciudadanía indignada.
Aunque no se logró superar el umbral establecido, lo cual deja sin piso jurídico al contenido de la consulta, es innegable que el gobierno y el Congreso recibieron ayer un mandato ciudadano que superó, con creces, la cantidad de votos obtenida por el mismo presidente Duque hace un par de meses. La legitimidad de la Consulta es indudable, y respetar el mandato ciudadano hace imperativo implementar sus puntos sin ningún tipo de modificación.
Por su parte, la campaña en Soacha no recayó sobre un solo sector. Colectivos, ciudadanos y algunos comités partidarios asumieron la tarea con la limitación de recursos, y el desgaste derivado de un año colmado de elecciones. Dos valoraciones al respecto: en primer lugar, se mantiene la tendencia de aumento de la participación en nuestra ciudad, que se refuerza con el crecimiento cuantitativo de las expresiones críticas de la política local (ver gráfica). En segundo lugar, destaca la emergencia de nuevos liderazgos, producto del auge de procesos sociales en la ciudad que, a su vez, protagonizaron el año electoral. El principal reto para estos sectores es ratificar estos resultados en las elecciones locales del próximo año.
Gráfica 1. Porcentaje de participación en las últimas seis elecciones
Es innegable que los sectores articulados a la campaña Anticorrupción en nuestra ciudad fueron la Coalición Colombia (Polo Democrático y la Alianza Verde); la Suacha Humana, y los colectivos sin filiación partidaria, que se lograron encontrar en medio del proceso para intercambiar reflexiones sobre el futuro de Soacha. Respetar el mandato ciudadano, expresado en un 46,21% de la participación, implica mantener los canales de diálogo abierto; construir en colectivo una agenda programática que permita armonizar las diferentes lecturas que hay sobre Soacha; potenciar los nuevos liderazgos; y avanzar en unidad rumbo al 2019 definiendo, ojalá sea el caso, una ruta estratégica que permita ir con una candidatura única de los sectores alternativos a la alcaldía de Soacha.
La escasa gobernabilidad de Eleazar González, subordinado de Betty Zorro y de los intereses políticos y económicos que lo hicieron alcalde, junto a todo lo que representa la clase política local, sumado al descontento ciudadano que se expresa desde el comentario de indignación hasta en la gestación de procesos organizativos, debe pasar factura en las próximas elecciones.
Apunte mental: Ya que la Consulta Anticorrupción superó el umbral en nuestra Soacha, ¿estarán el alcalde y los dino-concejales dispuestos a implementar los puntos de la Consulta respecto a publicar su declaración de renta, rendir cuentas a la opinión pública sobre su gestión, permitir a la ciudadanía participar sobre el uso de los recursos, y no seguir atornillados en los espacios de decisión pública?