Posible detrimento patrimonial si se modifica contrato de la primera línea del Metro de Bogotá: Procuraduría
Tras la insistencia del presidente Gustavo Petro de hacer un tramo subterráneo, la Procuraduría advirtió un posible detrimento patrimonial si se modifica el contrato de la primera línea del Metro de Bogotá.
La Procuraduría General de la Nación encendió las alarmas ante los riesgos que se podrían presentar por las posibles modificaciones al contrato de concesión de la primera línea del metro, que pretende cambiar el trazado para construir un tramo subterráneo.
Así se lo advirtió el ente de control a la Empresa Metro de Bogotá.
Para el Ministerio Público, los riesgos se verían representados en los impactos que se generarían por dichas modificaciones con mayores plazos en la ejecución del proyecto, incremento de precios en diseños y construcción, volatilidad del dólar, incertidumbre sobre la destinación del gran número de predios que ya fueron adquiridos y pagados para la construcción del metro elevado, posible detrimento patrimonial y vulneraciones al principio de planeación contractual, y afectaciones a la movilidad de los habitantes de la ciudad de Bogotá que reclaman prontas soluciones en el transporte público.
En atención a estos riesgos en la gestión contractual, el ente de control revisará los conceptos e informes en los que se plantea una modificación del objeto del contrato de concesión.
Cabe recordar que ayer se reunió el presidente Gustavo Petro, la alcaldesa de Bogotá Claudia López, la empresa Metro y representantes del consorcio chino con el fin de evaluar la propuesta de modificar el contrato para construir un tramo subterráneo.
La conclusión es que hay un manto de dudas jurídicas y se acordó establecer mesas técnicas para analizar las recomendaciones del constructor sobre la mejor opción, al igual que los conceptos jurídicos de la Casa de Nariño, que a diferencia de lo que dicen los chinos, concluyen que no habría riesgo jurídico.
Una de las propuestas del consorcio chino para no modificar el contrato y evitar líos jurídicos, es extender la primera línea del Metro de la calle 72 a la 100 de manera subterránea, construir tres estaciones y 3,9 kilómetros adicionales.
Finalmente, la alcaldesa Claudia López aseguró que el constructor descartó tres opciones de subterranización por razones jurídicas y mayor valor, y una cuarta que, si bien técnicamente sería viable, jurídicamente no. La que iría de la Avenida Primera hasta la calle 72 por la Caracas.
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