El desorden que las autoridades no controlan en Unisur

Posted on 21 de enero de 2015 by Periodismo Público

Luego de la puesta en marcha del puente peatonal de Unisur y del retiro del semáforo ubicado sobre la Autopista Sur, buena parte de los vehículos de servicio público se desvían por la vía paralela para recoger los pasajeros que salen de la estación Transmilenio. Sin embargo, la imprudencia de los conductores y la falta de control generan enormes trancones en este sitio.

Si bien es cierto la habilitación del tramo de la paralela comprendido entre Mercurio y Unisur ayudó a descongestionar la Autopista Sur, la imprudencia y falta de respeto de los conductores de servicio público generan enormes trancones al invadir dos y hasta los tres carriles de la vía para parquear y esperar varios cambios de semáforo sin importar la cantidad de vehículos que esperan pasar el trancón, generado debajo del puente peatonal.

“Desde que se habilitó este tramo de la paralela los señores conductores hacen lo que les venga en gana. No se conforman con trancar el carril derecho, sino que invaden el del centro y hay veces toda la vía, y eso por su puesto genera un enorme trancón”, manifestó Luz Marina Sierra, residente en el barrio Camilo Torres.

“De nada sirve que hayan habilitado este tramo de la paralela porque aquí queda uno embotellado. Muchas veces la demora es hasta de 20 minutos entre Mercurio y Unisur, eso es injusto porque los señores de los colectivos hacen lo que quieren y nadie les dice nada”, agregó José Miguel Agudelo, residente en Compartir.

Una de las molestias de la ciudadanía es la falta de control por parte de la policía de tránsito y de la recién creada Secretaría de Movilidad. “Yo nunca he visto un policía en ese sitio poniendo orden, entonces es una situación que aprovechan los conductores de los colectivos urbanos para esperar hasta tres cambios de semáforo y hacer enormes trancones”, explicó Antonio Cárdenas, habitante de la comuna dos.

Este medio le preguntó a un conductor de servicio urbano sobre la situación y simplemente dijo que él no podía irse vacío para su destino. “Hermano, si no aprovechamos que aquí sale gentecita de Transmilenio, nos vamos graves de viaje”, dijo.

Si bien es cierto el conductor tiene algo de razón, lo que la comunidad rechaza es la imprudencia y abuso al invadir dos y tres carriles de la vía, generando una gran congestión. “Es que es fácil, paren al lado derecho y dejen pasar a los que vienen atrás, pero lo que molesta es el abuso y la grosería porque una vez yo le dije a uno que se orillara y la respuesta fue cogerme a ‘madrazos’, incluso amagó con bajarse para agredirme”, aseguró Vladimir Palacios, usuario del transporte de Soacha.

Ahora la tarea es para las autoridades, se requiere con urgencia ponerle freno a este atropello que están cometiendo a diario los conductores de servicio público. La secretaría de Movilidad debe coordinar con la Policía de tránsito una fórmula para evitar que se sigan presentando grandes trancones en el semáforo ubicado debajo del puente peatonal San Mateo.