Jóvenes de Soacha rinden homenaje a la vida y rechazan la violencia
El sentido homenaje rendido a la labor social del joven Klaus Zapata, estudiante de comunicación social y periodismo, productor audio visual y militante de la Juventud Comunista (JUCO) de Soacha, dejó como precedente un contundente y multitudinario llamado a la No violencia, el respeto a la vida y la libertad del pensamiento.
Klaus Zapata, joven estudiante y visionario que llegó a Soacha siendo apenas un niño, defendió vehementemente, durante su corta juventud, la labor social encaminada a garantizar el cumplimiento de los derechos humanos; así mismo se destacó dentro del ámbito educativo como un estudiante comprometido con sus metas y propositivo al momento de tratar temas fundamentales en torno al tejido social.
El seis de marzo, la lucha personal que el joven impulsaba por la protección de los derechos humanos y del ámbito social, se vio interrumpida a causa de un aparente acto de intolerancia que acabó con su vida tras culminar un partido de microfútbol que se encontraba disputando en el barrio Ciudad Latina en la Comuna uno de Soacha. Ante la conmoción generada por la violenta muerte del joven, cientos de estudiantes universitarios, activistas y militantes de los partidos comunistas presentes en Soacha, Unión Patriótica y Juventud Comunista, se unieron al multitudinario homenaje que destacó la labor del joven.
Cientos de personas se reunieron en el Parque Principal de Soacha, posteriormente hicieron un emotivo recorrido a través de la zona céntrica municipio, recordando a Klaus y el legado que ahora reposa en los centenares de jóvenes que apoyan las causas sociales, lo cual se convierte en un imponente mensaje de No Violencia, el respeto por la vida y la juventud.
“Klaus vive, la lucha sigue”, fue una de las tantas frases en honor al joven activista que llamaron a continuar la labor que siempre lo destacó, junto a la de “Klaus presente”, que hacía referencia al legado en torno a la búsqueda de progreso social que Zapata estaba acompañando desde hace varios años y que se vio plasmado en el multitudinario acompañamiento a su familia y amigos la tarde en que se llevaron a cabo su exequias.
“Al referirnos como camaradas de Klaus, no hablamos solo de sus compañeros de la JUCO, porque camaradas de Klaus somos todos aquellos los que nos pensamos un mundo diferente. Aquí estamos, agradeciéndole a la infinidad de organizaciones sociales y populares. Quiero hacer una mención especial al movimiento audio visual en Soacha que se ha dado la ‘pela’ estos días por no dejar que la memoria y labor de Klaus se diluya en el tiempo. Nuestro compañero tiene que vivir en todos, y para ello serán muchas las jornadas en las que conmemoraremos la vida y acciones de nuestro compañero, pero más importante aún: ¡Tenemos que rechazar tajantemente la violencia como forma de control social hacia los jóvenes!
No más estigmatización, no más criminalización, no más militarización, no más persecución contra la vida juvenil, ya basta de la guerra contra los jóvenes. Esta movilización tiene que ser una demostración de fuerza contra los canallas que le quitaron la vida a Klaus el domingo pasado”, manifestó Heiner Gaitán, representante de las JUCO y amigo de Klaus Zapata.
Finalmente, uno de los llamados que se reiteró con mayor vehemencia fue a la justicia y pronto esclarecimiento de los hechos que causaron la muerte de Klaus. Así mismo, los jóvenes, amigos y activistas presentes piden a las autoridades avances en la investigación que permita la captura de los responsables del hecho.