Despiden a vigilante que impidió ingreso de colados armados a Transmilenio

Una absurda decisión fue la que tomó la empresa de seguridad
al despedir un vigilante y sancionar a dos más, luego de que estos se vieron
obligados a defenderse de cuatro individuos que se colaron en el sistema y los
atacaron con armas blancas.

Los hechos ocurrieron el  sábado en la estación de Transmilenio de la
calle 22. Varios colados se enfrentaron a un auxiliar de policía y tres guardias
de seguridad. Uno de los vigilantes, ante el peligro de ser herido con arma
blanca, disparó su arma de fogueo y sacó corriendo a los hombres. Lo polémico es que al final fue despedido.

Los vigilantes pertenecen a  la Unión Temporal Gos 2019, que decidió desvincular
al guardia que usó el arma de fogueo, pues su uso «no está permitido para
los guardas de seguridad en las estaciones del Sistema», dice un
comunicado de Transmilenio.

«Adicionalmente, la empresa de vigilancia aplicó
sanciones disciplinarias a los otros dos trabajadores que se vieron
involucrados en la situación, con suspensión temporal, por no acatar los
protocolos establecidos para estos casos», añade el texto.

Según el comunicado de Transmilenio,
si una persona se cuela en el sistema, los guardias deben hacerle un llamado de
atención verbal. En caso de que este no se atienda o haya una agresión contra
el vigilante, hay que «solicitar el apoyo de la Policía Metropolitana de
Bogotá para que atienda la situación». 

Por esta razón, el sistema de transporte le pidió a la
empresa de vigilancia que entregue durante esta semana «las explicaciones
por los hechos ocurridos”.

En la grabación se observa de cerca cómo en la entrada de
esa estación un auxiliar de policía intenta someter a uno de los colados que
viste de chaqueta roja, pero en ese momento aparecen dos aliados del hombre e intentan
retener al uniformado.

En ese momento llega un guardia de seguridad y le da un puñetazo
en la cabeza a uno de los colados, quien inmediatamente se pone en posición de
pelea.

Mientras eso sucede, el uniformado, que forcejea con dos
hombres, termina recibiendo un puño en el rostro. Entonces, el policía, molesto
por el golpe, saca su bolillo y a fuerza de garrote termina sacando a los
hombres de la estación, quienes  inmediatamente sacan navajas y vuelven a la
pelea.

Ante el desespero y la tensión de las armas blancas con las
que los retaban a pelear, uno de los
guardias saca su arma de fogueo
y les dispara varias veces sin pensarlo.
Estas pistolas disparan balas de salva y sirven como forma de intimidación.

Fuente: RCN radio

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