A nuestra Patria la Galopará la Juventud Colombiana

Cuando llegamos a estudiar a un colegio o universidad por primera vez, se deben hacer dos preguntas: ¿Qué quiero ser? y ¿Para qué serviré en un futuro?


Estos son dos cuestionamientos fundamentales en la etapa académica de toda persona o estudiante, pero jamás se preguntan: ¿Estudiaré para fortalecer y generar ideas de avance para mi patria?, ¿Buscaré un bienestar social, donde los menos afortunados tengan una dignidad mediante mi preparación académica?, y ¿Por qué no soñar con una Colombia de sonrisas y esperanzas en un futuro mediante mi contribución de ideas?

Colombia, un país tildado de «miserable» , sometido en la tristeza de la violencia que diariamente enfrenta cada colombiano sin importar su condición socio-cultural y manchado por fantasmas de narcotráfico, donde nadie ha ganado la guerra que nos atormenta desde hace años, y el único damnificado ha sido esa persona respecto de la cual debemos sentirnos orgullosos, ya que es la que tiene nuestra raíces en las manos, transmitió ese gen de trabajo, de convicción y de amor a Colombia y es digna de nombrarla: El Campesino. En efecto, es quien espera una respuesta nueva, de avance, progreso y fuerza en el corazón de las nuevas generaciones para cambiar su destino y contribuirle una Colombia más justa, equitativa que defienda diariamente sus derechos y le recuerde lo glorioso de ser colombiano. Esa respuesta es la que espera el Campesino Colombiano por el estudiante Colombiano.

Actualmente, la palabra estudiante es una responsabilidad, porque de aquel estudiante se deberán obtener los mejores resultados para un país donde espera respuestas que generen un bienestar social, para las futuras semillas que serán los frutos del mañana. Es decir, para las futuras generaciones de Colombianos, los cuales desearan sentirse cada día Colombianos. De igual forma, la formación y contribución que un estudiante exige estar siempre con la cara en alto y hacer reconocimientos a todas las personas que no han podido soñar de manera justa y digna por culpa de aquellas balas que opacan la armonía Colombiana.

Es en ese momento, donde mujeres y hombres deben sentir en su corazón la representación de todas las personas que han dado un grano de pasión por Colombia, y deberán reconocer que están en mora, y tener fuerza para enfrentar las adversidades de la ausencia de oportunidades que perjudican y opacan los sueños del niño, adulto y persona de la tercera edad, es por eso que el buen líder formado en convicción del interés general deberá sentir día y noche pasión por Colombia.

Sin embargo, debe definirse el líder Colombiano porque deberá tener un concepto en su momento. En primer lugar, se debe señalar “LA DISCIPLINA”, porque sin esta no existirá un líder íntegro, con responsabilidad, encaminado a la comunicación de ideas a una sociedad. Sin la disciplina no se podrán lograr muchas acciones que beneficien a una sociedad, que sea fraterna, ya que la fraternidad permite que se cumplan expectativas y se atenderán las solicitudes de personas perjudicadas por las diversas circunstancias, que a su vez se sienten seguras con el respaldo del líder que desde la Universidad se cuestionó en generar un cambio por el interés general.

¿Quién es el líder formado en la Universidad?

Ese líder, es la máxima creación, es la voz de la academia donde sus bases son tan sólidas como las raíces de un árbol que genera vida y esperanza a demás árboles, formando bosques. Bosques que estarán unidos, con una constante evolución y protección por su territorio. Así es el líder universitario, una persona sin ambiciones personales, siempre buscando el amor a la ilustración para contribuir con su conocimiento y oportunidades a una sociedad, donde el interés general siempre primara más que el particular, y al mismo tiempo ese líder cuando llegue a su cúspide recordará la importancia, del compañerismo, de la humildad, de la responsabilidad académica, de sus valores, de sus principios y del saber usar los zapatos del otro, esos son los verdaderos principios de un soñador, de un combatiente por generar cambios sociales, ese es el verdadero líder estudiantil.

¿Por qué un líder debe tener esos principios?

Debido a que la ausencia de estos genera un caos en el alrededor del líder, lo guiará al mundo de la ambición, del poder, del fracaso y de la desilusión de sus seguidores de ideas, que se convertirán en falas promesas, tildándolo en un FALSO SOÑADOR.
El compañerismo: es fundamental, sin este principio, el líder sería una persona egoísta y buscara siempre el interés particular, gran pecado de un líder. Con el compañerismo las fronteras se abrirán y la confianza de sus compañeros vendrá a la mano, con el propósito de ser más sólidas sus ideas o propuestas.

La humildad: Un gran líder, no será NUNCA más ni menos que nadie, su formación es igual que la de todos los ciudadanos y será él quien deba dar su mano para ayudar a los que están siendo perjudicados por algún motivo, sin la humildad el gran líder vivirá en la ausencia del mundo y será una persona no grata, egoísta y no con proyecciones de cambios.

Los valores: Sin los valores, el líder será una persona justa, de pasión, de convicciones en la defensa de la honestidad, del amor a proteger lo justo y a los justos.
Los principios: Son la columna vertebral de las ideas de todos gran líder, sin ellos el respeto, el buen comportamiento y el entender a su sociedad no lo dejarían entender el compromiso que deberá defender.

Saber usar los zapatos del otro: El gran líder deberá, formarse como receptor de problemáticas, de las cuales deberá solucionar, ser justo y procurar ayudar al perjudicado, saber vivir diversas realidades que él no vive, ser consiente que en la vida muchas personas nacieron humildes y otras no, lo cual a las dos deberá protegerlas y buscar la protección en todos sus derechos y contribuir un cambio social.

Rafael Escobar Sánchez
chafa3@hotmail.com

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