Cae cargamento de carne de tortuga icotea en la Terminal del Salitre; autoridades decomisaron 9,22 kilogramos

Desde el pasado 15 de marzo, la Secretaría Distrital de Ambiente (SDA) y la Policía Ambiental y Ecológica han incautado 35,75 kilogramos de carne de esta especie, la cual se encuentra amenazada. Por este comercio ilegal, los traficantes podrían pagar hasta 35 mil salarios mínimos mensuales legales vigentes y estar tras las rejas entre 4 y 9 años.


Precisamente ayer en horas de la mañana, las autoridades ambientales decomisaron 9,22 kilogramos de carne de tortuga icotea en dos flotas en la Terminal de Transporte del Salitre, provenientes de dos municipios del departamento del Magdalena; la carne se pretendía comercializar al interior de la capital del país.

Dos pasajeras fueron capturadas por parte de la Policía y luego llevadas a la Fiscalía para ser judicializadas. Según el Código Penal, las mujeres podrían estar en prisión entre 4 y 9 años (48 y 108 meses), y pagar multas de hasta 35 mil salarios mínimos mensuales legales vigentes.

La carne era transportada en cajas de icopor. 7 kilogramos venían en una flota proveniente del municipio de El Banco Magdalena, y los 2,22 kilogramos restantes de Santa Bárbara del Pinto. En el operativo se encontró carne de tortuga descompuesta, mezclada con queso costeño, sueros y pescado.

El cargamento se encuentra en manos de la Fiscalía, ya que será utilizado como prueba en el proceso de judicialización. Luego será entregado a la SDA para que le de la disposición final adecuada.

Con esta incautación, la Secretaría de Ambiente y la Policía Ambiental y Ecológica suman 35,75 kilogramos de carne de tortuga icotea decomisada en las terminales de transporte.

La icotea es una tortuga de agua dulce que puede alcanzar los 25 centímetros de longitud y que sólo habita en la Costa Atlántica de Colombia. Fue declarada por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) como una especie amenazada.

Según Margarita Flórez, Secretaria de Ambiente, el sacrificio de las icoteas es un crimen ambiental “Muchos cazadores primero las ponen vivas en agua caliente y luego las ponen boca arriba para empezar la matanza. Con una segueta las abren y les extraen la poca carne que tienen. Una icotea adulta, que pesa aproximadamente 1.500 gramos, sólo tiene 20 por ciento de carne en su cuerpo”.

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