Capturan cabecilla de grupo criminal que asesinó a cuatro personas en Guaduas
Las víctimas, asesinadas el pasado 2 de agosto, fueron decapitadas y arrojadas al río Magdalena para evitar su identificación. Por lo menos 8 personas más habrían participado en los homicidios.
Las investigaciones desarrolladas por la Fiscalía General de la Nación, en conjunto con la Policía Judicial Sijín, permitieron en las últimas horas la captura y judicialización del presunto cabecilla de un grupo delincuencial, señalado de ser uno de los responsables de la muerte de cuatro personas, cuyos cuerpos fueron hallados flotando en el río Magdalena el pasado 3 de agosto, en jurisdicción del municipio de Guaduas (Cundinamarca).
Se trata de John Freddy Carvajal, quien según los elementos de prueba, habría perpetrado el crimen junto con 8 personas más.
El procesado fue llevado ante un juez de control de garantías de ese municipio cundinamarqués, quien por petición del ente acusador le impuso medida de aseguramiento en centro carcelario, por los delitos de homicidio agravado en concurso homogéneo y sucesivo con porte ilegal de armas de fuego de uso de privativo de las Fuerzas Militares, en concurso de hurto calificado y agravado.
De acuerdo con las evidencias y la declaración de testigos, las víctimas se transportaban el 2 de agosto en un vehículo particular por un paraje en zona rural de Guaduas, a la altura de la vereda Malambo en la Provincia del Bajo Magdalena, Cundinamarca.
En ese lugar, hombres fuertemente armados interceptaron a los ocupantes del vehículo y luego les dispararon en la cabeza. Posteriormente, los cadáveres fueron decapitados y lanzados río Magdalena, ubicado a menos de 400 metros del sitio donde ocurrieron los hechos.
Al día siguiente, uniformados del Departamento de Policía de Cundinamarca y del Cuerpo de Bomberos de la población, recuperaron los cuerpos.
Según se indicó, se trató de un homicidio múltiple por el dominio territorial para los cobros ilegales y extorsión a empresarios y comerciantes de la provincia del Bajo Magdalena, en el departamento de Cundinamarca.
“Se presentan como paramilitares y presionan a las víctimas con pagos ilícitos, como vacunas, para permitirles trabajar”, advirtió la fiscalía adscrita a la Seccional Cundinamarca a cargo de la investigación.
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