Razones técnicas que obligan a llevar el metro hasta Bosa
Por hallazgo de un antiguo relleno sanitario se debe buscar nuevo terreno para el patio de trenes.
El Distrito se vio obligado a extender la primera línea del metro pesado en 3,5 kilómetros hacia el sur, en Bosa, debido a que en el trazado se encontró con un antiguo relleno sanitario que no fue cerrado apropiadamente en los años 80.
Se trata del relleno de Gibraltar, que operó a cielo abierto entre 1979 y 1988, cerca del sector de Patio Bonito. En el lugar, los residuos eran descargados sobre el terreno sin control. Durante su funcionamiento, careció de un sistema de impermeabilización de fondo, de sistema de drenaje, de control de gases, de lixiviados (líquidos contaminantes de la basura) y de aguas de escorrentía.
Precisamente, en ese punto estaba previsto localizar el patio-taller de los trenes del futuro metro, pero el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) encontró que enfrentaría dificultades por licencias ambientales, debido a la inestabilidad que representa ese terreno.
La semana pasada, cuando hizo el anuncio de la extensión de la primera línea, en Bosa, el alcalde Gustavo Petro no precisó las razones y dejó la sensación de que se trataba de parte de un paquete de medidas para mejorar la movilidad. “Lo primero que tendríamos que decir es que en Bosa hay dos proyectos que me parecen estratégicos. El primero es el metro; se ha decidido que la línea del metro se extienda del portal Américas a donde llegaba, lo que significa que por Bosa aproximadamente cuatro kilómetros adicionales recorrerán la zona occidental, que mejorarán sustancialmente las condiciones de movilidad”, dijo el jueves pasado.
Lo cierto es que fue el hallazgo del antiguo relleno lo que obligó a buscar un nuevo terreno para el patio de trenes, que se encontró 3,5 kilómetros más hacia el sur del trazado inicial. Por eso, la primera línea del metro llegará hasta Bosa y, de paso, beneficiará, cuando se construya, a esa localidad.
Los estudios de detalle de la obra, por 70.000 millones de pesos, los viene realizando la firma Euroestudios, en consorcio con Idom Ingeniería y la colombiana Cano Jiménez, y los del trazado inicial, que va de El Tintal (en Kennedy) a la calle 127, deben ser entregados el 24 de septiembre.
El Distrito está pendiente de que el contratista entregue una propuesta sobre los costos de los estudios de diseño del nuevo tramo, que podrían estar a finales de este año. Por ahora, el costo del metro se estima en 6,8 billones de pesos, pero la cifra final la suministrarán los estudios.
Fuente: eltiempo.com
Siga a Periodismo Público en Google News. Suscríbase a nuestro canal de Whatsapp