“Uribe, el puro centro y las coincidencias”

Llevo escribiendo de manera intermitente esta columna durante un año, el título siempre ha sido el mismo “Pensar en Grande”. Los temas han cambiado de acuerdo a las coyunturas o a aquello que quiero expresar y que siento que merece ser leído por la comunidad de Suacha. Tengo que confesar que las líneas que escribo obedecen más a un pensamiento utópico, es decir un sin-lugar, o algo que aún no ha llegado a materializarse, mis narraciones imaginan como sería o puede ser nuestro municipio si dejamos de lado las malas costumbres políticas y entre todos tejemos nuestro territorio, una ciudadanía que piensa en grande y que a diario con sus acciones políticas, sociales, culturales, etc., transforma no sólo su espacio local, sino que también es ejemplo para una nación.


Sin embargo, debido a las últimas noticias creo que voy a tener que modificar el título de mi columna, nunca imagine que yo, un declarado jovén de izquierda, pudiera tener alguna coincidencia con el ex-presidente Álvaro Uribe Vélez, el mundo es un pañuelo, pero en algunos casos el pañuelo está sucio y no vale la pena ensuciarse para lavarlo. En los próximos días, nos deleita con su visita el Dr. uribe y su puro centro democrático, el eslogan del primer foro ciudadano es “Soacha piensa en grande”, imagino ya la romería de pueblo en el auditorio, imagino los comentarios y las propuestas, pero peor aún, imagino como poco a poco mi columna se derrumba, se cae y pierde interés, si alguna vez lo tuvo. Imagino al concejal Jaramillo, opositor del matrimonio igualitario y defensor de esa tríada fascista “familia, tradición y propiedad”, al lado del ex y sus precandidatos hablando sobre los problemas de la minería y la educación en Soacha, defendiendo la familia, pero ocultando el drama de los desaparecidos y de las madres de los falsos positivos.

No es coincidencia, tal vez tanto Uribe como yo estamos en el puro centro y ambos podemos pensar en grande, así el ex y sus precandidatos se tengan que empinar. Claro, ambos compartimos un eslogan, pero ambos no tenemos la misma altura, yo soy un poco más alto y menos peligroso. Pero pensemos en grande, aceptemos la invitación del ex, primero que todo, busquemos un caballo, nos montamos en él y con el masato en la mano damos una demostración de la destreza sobre el animal en el parque principal. Lo anterior, porque es necesario meterse en el personaje, saber como actúa, como siente el territorio, desde dónde mira el mundo. Ya encima del caballo, comenzamos a dar órdenes (no olviden el acento montañero):

– A ver usted mijito, si, usted jovén, si ve los cerros de allá, los del oriente, con esas arenas. Con su emprendimiento, mijito, podemos montar una empresita que sea asesorada por mis hijos. Eso hay que explotarlo y entregarlo a la empresa privada, sólo así la nación y el municipio se fortalecen en recursos.

– Que el problema es la seguridad, no se preocupen por eso, la paz sólo se logra a través de las armas y el fortalecimiento de las fuerzas armadas, por eso vamos a montar un batallón, para que sus hijos tengan allí una oportunidad y defiendan la patria. Un batallón al lado de las casas de sus madres, para no llevarlos hasta Norte de Santander, de pronto se pierden por allá.

– Y los que no quieran ir al ejército, para eso esta el SENA o los institutos técnicos, en nuestra nación no necesitamos profesionales, necesitamos técnicos que pongan a andar las industrias y el capital privado de las multinacionales.

– No crean que el área metropolitana les va a ayudar a solucionar el problema de la movilidad, eso es una mentira, tenemos que construir la ALO, pasar por encima de los humedales, entregar esos contratos a una concesión, Andrés Uriel conoce unos buenos muchachos que pueden construir esas vías. Andres Uriel!!!! venga pa’ca como es que se llaman: – Los Nule, presidente, ya casi salen.

Que imaginación, pero confieso que prefiero bajarme del caballo, lo mío es andar a pie. Lo mío es pensar en grande, pero de otra forma, imaginando un mundo más acorde con nuestra historia y que responda a las coyunturas sociales y políticas de nuestra actualidad. Respeto a quienes se quieran quedar en el caballo de la seguridad democrática y engrandecer a unas personas, que desde mi punto de vista, le causaron un daño enorme a este país. Después de ocho años de gobierno del ex, recibimos un país plagado de concesiones mineras, un país que según él y sus asesores, era el país del posconflicto, en donde la guerra ya se había terminado y podíamos vivir en paz. Un país asistencialista en donde es mejor y más rentable tener hijos para recibir un subsidio por cada uno de ellos y decir luego que todo esta bien. Un país sin oportunidades laborales para nuestros jóvenes, un país moribundo en temas de salud.

A pie el territorio es otro, no es el punto cero de la comodidad del gamonal a caballo, son los múltiples puntos, caminos, barrios, sujetos, mujeres, hombres, niños, jóvenes que nos demuestran que en Colombia todavía existe un conflicto social, conflicto que no logró, ni logrará solucionar Uribe con su discurso de la guerra.

Como joven del municipio y seguramente recogiendo la percepción de muchos de ellos y en reconocimiento a la memoria de las víctimas RECHAZÓ LA VISITA DEL EX-PRESIDENTE ÁLVARO URIBE VÉLEZ Y DE LOS PRECANDIDATOS DE SU PARTIDO A NUESTRO MUNICIPIO. PENSEMOS EN GRANDE: “NO A LA POLÍTICA DE LA GUERRA EN COLOMBIA”

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