Un nuevo proyecto de movilidad toma forma en Cundinamarca
La iniciativa busca analizar si esta alternativa de transporte puede convertirse en una opción real para mejorar los desplazamientos entre La Calera y Bogotá.
La Empresa Férrea Regional (EFR) iniciará en 2026 los estudios de factibilidad que evaluarán la viabilidad técnica, ambiental, social y financiera de cable aéreo que pretende mejorar la movilidad entre el oriente y el centro de la capital.
Una opción para aliviar la congestión vial
El anuncio de la EFR marca un nuevo paso en la planeación del cable aéreo entre La Calera y Bogotá, una iniciativa que durante años ha estado sobre la mesa como alternativa para mejorar la movilidad en el oriente de la capital. Con el inicio de los estudios de factibilidad en 2026, el proyecto entra en una etapa clave que permitirá definir si puede materializarse.
Este corredor ha sido identificado como uno de los más congestionados, especialmente en horas pico, cuando miles de personas se desplazan diariamente por motivos laborales, académicos y comerciales.

Integración con el sistema de transporte
Uno de los puntos centrales de la evaluación será la forma en que el cable aéreo podría conectarse con los sistemas de transporte existentes en Bogotá y Cundinamarca. La articulación con otras modalidades es clave para que el proyecto no funcione de manera aislada y realmente contribuya a mejorar los desplazamientos de los usuarios.
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La integración permitiría facilitar transbordos y ofrecer un servicio continuo para quienes se movilizan entre el municipio y la ciudad.
Evaluación técnica, ambiental y financiera
La EFR señaló que el proceso de estudios permitirá revisar a fondo la viabilidad del cable aéreo desde múltiples frentes. El análisis abarcará desde la ingeniería del sistema y su comportamiento ambiental, hasta los efectos sociales, el marco legal y la sostenibilidad económica del proyecto.
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Este ejercicio técnico también servirá para dimensionar el alcance real de la obra, estimar su inversión y definir cómo podría financiarse. Al mismo tiempo, se evaluará su relación con el entorno y las condiciones necesarias para que la infraestructura se integre de manera responsable al territorio, bajo estándares actuales de sostenibilidad y regulación.
Foto: Secretaría General y de Cercanía al Ciudadano






