Balance de las inundaciones presentadas en Soacha
Luego del desbordamiento del Río Soacha y las crecidas de los ríos Tibanica y Bogotá, Periodismo Público dialogó con algunas personas que resultaron afectadas en sectores de las comunas 2,3 y 6, además del corregimiento número dos, quienes explicaron cómo está la situación actualmente.
Los barrios Pradera II, Danubio, Olivares y la Vereda El Charquito, fueron algunos de los sectores que este fin de semana sufrieron las inclemencias del invierno, y aunque si bien hubo una rápida acción tanto de sus habitantes como de las mismas autoridades para evitar un mayor perjuicio, lo cierto es que el riesgo continúa debido a las constantes lluvias y al aumento del caudal de los afluentes que circulan cerca de estas comunidades.
“Las calles del barrio se inundaron, pero por fortuna el agua no ingresó a las viviendas y logramos solucionar rápidamente este problema. Nuestra dificultad no se deriva tanto de las crecidas del Río Soacha, sino de las aguas negras que se devuelven por las tuberías a causa de las obras que se realizan en el ‘Conector Canoas’, donde instalaron unos aliviaderos que están originando el impase. En ocasiones anteriores hemos radicado oficios y derechos de petición solicitando que se nos solucione el problema pero hasta ahora no ha pasado nada”, explicó Pedro Guzmán, Presidente de la JAC de La Pradera II en la comuna seis.
Aunque el desbordamiento del Río Soacha nuevamente causó afectaciones en los barrios Cardal y Llano Grande, hasta ahora no ha sido posible contactar a sus residentes para conocer el balance luego de la emergencia.
“La situación pudo ser controlada gracias a la limpieza que se hizo sobre el puente que conduce al barrio, el viernes las autoridades estuvieron colaborándonos con la instalación de jarillones sobre el puente y la evacuación de las aguas que había sobre el terreno. Sin embargo en este momento aún nos encontramos evacuando las aguas que permanecían por el lado de la Hacienda Puyana. La Dirección de Servicios Públicos nos aseguró que en la tarde de hoy (sábado) o mañana temprano nos enviaría un vactor para ayudar a retirar el barro. Tenemos cerca de 45 viviendas afectadas. Respecto al desbordamiento del río nos aseguraron que ya está en proceso la construcción del nuevo puente y el nuevo Box Culvert”, expresó Fabio Parra, habitante del barrio Danubio.
De otra parte, en Olivares la crecida de la quebrada Tibanica aumentó en casi un metro el nivel de este afluente, inundando varias viviendas y obligando a la evacuación de algunas familias con niños que sufren de Neumonía.
“Estuvimos completamente inundados pero la situación ya está un poco controlada, aunque de todos modos nos sigue preocupando el hecho de que llueva un poco y la quebrada se crezca para que se desborde por la parte alta. En la mañana del sábado estuvimos con el Sr. Alcalde, quien observó la situación y aseguró que va a examinar para establecer qué medidas se podían tomar, pero lo cierto es que siempre es lo mismo y nunca se ha dado una respuesta ni una solución definitiva. Son en promedio unas 100 familias las que resultaron damnificadas. El canal permanece lleno de lodo”, indicó Ana Gladys Acosta, Presidenta de la JAC de Olivares.
Finalmente en El Charquito, la incertidumbre reina entre los residentes del lugar debido al aumento de la cota del Río Bogotá y el riesgo que esto traería debido a los percances que se han presentado en zonas cercanas como la Vereda San Francisco y el Salto del Tequendama.
“El nivel del Río Bogotá está subiendo mucho, la situación está complicada cerca de San Francisco y el Salto del Tequendama. Afortunadamente no se han presentado inundaciones, pero nos preocupa esa crecida constante que ya va en más de un metro y tiende a aumentar, algo que jamás había visto en los 21 años que llevo viviendo acá. Estamos pendientes sin embargo de lo que suceda, teniendo en cuenta el riesgo que hay en los sitios cercanos, precisamente estuvimos hasta el sábado a las 2am colocando lonas para reducir el riesgo de inundación”, agregó Mario Medina, residente de El Charquito.