A quien le interese: Colombia sí es diversa
Es cierto, ¡ya hay diversidad! Colombia es diversa pero más allá que esto se dé por una distinción o reconocimiento propio de una condición sexual, Colombia es diversa en todo porque:
1. Porque según nuestra formación, entorno social y principios, nos duele y le apostamos más a un fenómeno en particular, olvidando que la construcción de lo público, es competencia de todos. No hacemos de lo público algo integral y nos olvidamos por completo que existen otras coyunturas por las que en verdad valdría la pena también moverse.
2. Existen medios de comunicación que desinforman y tergiversan la realidad, manipulados obviamente, por la financiación de los planes de medios que las instituciones contratan; sesgando la información que se ofrece al público. Es claro que este fenómeno causa que la información publicada es para el beneficio de unos y la distracción de otros.
3. Porque independientemente de la posición o identidad que se tenga, sucede que ante cualquier evento público o particular se demuestra que las ofensas y los insultos terminan siendo la forma con que se refuta o contrargumenta, dejando por el piso esa lucha ideal de igualdad de derechos y por supuesto la TOLERANCIA.
4. Porque hay manipulación de los Derechos, donde hago valer los que me pueden importar como lo es la Igualdad y la Libertad, pero arremeto contra los que se quieren expresar o levantar en protesta.
5. Porque existimos ciudadanos que solemos tomar partida ante cualquier tropiezo, para hacer burla de las desgracias o luchas de otros; como por ejemplo, tomando las faltas que algunos pocos han cometido para ofender a toda una institución (ej: Policía, Iglesia, Ejército y demás), o burlarme de un amigo, familiar o compañero de trabajo por un comentario o conducta que refleja doble sentido.
6. En muchos casos, se suele invocar el nombre de Dios ante cualquier tipo de desgracia o una simple mala pasada, como lo puede ser un simple golpe, la pérdida de un examen o hasta la muerte de un ser querido; demostrando a quienes nos rodean en esos eventos, que somos los más fieles creyentes, pero nuestra conducta, juicios y argumentos van en contra de todo principio bíblico. Creo que esto hoy en día le llaman “Doble Moral”.
7. ¡Porque se suelen hacer llamados, campañas y grandes movilizaciones! en pro de la tolerancia y la cero discriminación; pero si alguien diferente a mi forma de pensar se manifiesta, la mejor forma de refutarle como ya se mencionó, es pisotearle y opacarle sus derechos. Tristemente, en otros casos se ha visto y señalado que si el que se moviliza pertenece algún grupo social, su forma de pensar es consecuencia ese mismo entorno social.
8. Porque se suele insultar o arremeter contra una institución, ya sea que tenga fines religiosos, políticos, sociales o de cualquier otra índole, como si ello fuese la causa de las malas decisiones que los ciudadanos solemos tomar; hasta donde sé, somos libres de decidir desde que zapatos me pondré, hasta con quien me quiero casar. Por lo que suena increíble señalar a otros cuando no soy capaz ni de mirarme y promover un cambio con mi actitud y vocabulario.
9. Porque sucede que ante eventos o fenómenos sociales o políticos, definimos propiamente cuales son los que nos afectan y bajo ese criterio que le llaman hoy en día “Doble Moral”, señalamos a los medios de comunicación de ser los culpables de desinformar, pero para los que en particular nos indignan, son la principal fuente de consulta, postenado y reposteando lo que dicen.
10. Porque tomamos términos o palabras para referirnos y etiquetar a lo que sea, como lo es la “homofobia”. De hecho, considero y sugiero que sería muy bueno para quienes utilizan este término para señalar a quienes piensan diferente, que revisen las raíces del mismo, ya que el solo uso del término, genera auto y discriminación en la totalidad de la población.
11. Porque existen Instituciones públicas donde se izan banderas con identidad propia, se promueven actos con tintes religiosos, y otros tipos de eventos que promueven y apoyan en si una comunidad o grupo social; pero se trata de participar en política, si está prohibido por la Ley.
Así las cosas, sería bueno revisar lo que simplemente ha sucedido hasta el día de hoy con la comunidad LGTBI: han logrado representación, aprobación legal de sus uniones y respeto por sus derechos (ver código de policía). Así que afirmar que los hechos transcurridos el día de ayer, obedecen a una singular discriminación por la Mayoría de las familias colombianas, es absurdo cuando en eventos anteriores no se visualizó en el país, un evento de tal magnitud que al menos intentará permear o afectar la lucha de sus derechos.
Por lo anterior, es importante dejar Algo en claro: que esta vez la ciudadanía se movilizó a raíz del Gobierno querer imponer los intereses particulares de unos cuantos, con una cultura en escuelas y colegios a niños que hasta donde sé, estos aun no tienen la capacidad suficiente de raciocinio para comprender lo que sucede, afectándoles así su capacidad y derecho de desarrollar su identidad y libre personalidad. Por algo, solo hasta los 18 años se puede votar y elegir por quienes nos van a representar institucionalmente.
Dicho así, que instituciones, organizaciones religiosas y educativas se movilicen, no es criterio válido para definir que la protesta se haga en pro de los valores de las mismas; estos son solo grupos sectoriales que se UNEN a un solo propósito: “defender los principios y los valores a la luz de la constitución, de la familia como institución y núcleo fundamental de la sociedad”. Así que de si violar derechos se trata, creo que hubo una gran violación de los de los grupos que se movilizaron, afectando la libertad de expresión y el derecho a la protesta.
Nota Final y aclaratoria: Es claro que así como una señora pudo haber salido con un cartel ofendiendo a la Ministra Parody, también en el Huila salió un miembro de la comunidad LGTBI arremetiendo contra quienes decidieron marchar, por lo que si se va a señalar, señalemos inicialmente todo, pero primero desde nuestro actuar antes de juzgar a los demás.
Antes de pretender cambiar el mundo, lo recomendable es cambiarnos a nosotros mismos.
Víctor Sánchez
Politólogo
Candidato a Magister en Administración Pública