Aprobados protocolos para la reapertura de los templos religiosos
Se aprobaron los protocolos para poder abrir de forma gradual las Iglesias que fueron cerradas a causa del Covid-19. Se pondrán en marcha planes piloto en dos municipios libres de coronavirus en el país.
Estas pruebas piloto se aplicarán a partir de los próximos días en dos municipios que aún no registran casos de contagio por el Coronavirus; los territorios son el de Salamina, Caldas y Aguazul, en Casanare.
Las normas de bioseguridad o protocolos aprobados incluyen recomendaciones a seguir como: Distanciamiento de dos metros. Inscribirse previamente para participar en la eucaristía, se tendrá un cupo establecido según cada parroquia y su capacidad de aforo.
Se evitará el contacto físico en el tiempo de la liturgia. Se seguirá con el signo de paz, omitiendo contacto o abrazos. Para el momento de la comunión se suprime diálogo entre el sacerdote y el feligrés, será absolutamente en silencio al distribuirse la sagrada comunión. Uso del tapabocas, desinfección general, toma de temperatura, entre otras recomendaciones.
Reapertura gradual de la Iglesias
Después de aplicar los protocolos de bioseguridad en las Iglesias de estos dos municipios escogidos, el Gobierno Nacional y la mesa de diálogo para este tema, valorarán si fueron cumplidos estos requerimientos y se decidirá entonces, las etapas a seguir, para reactivar la apertura de forma gradual, de los templos católicos en Colombia.
Los principales argumentos que se presentaron al Gobierno Nacional, por parte de los Obispos colombianos para acelerar la apertura de las Iglesias fueron; la incidencia que tiene en las personas mantener activa una vida espiritual para su normal desarrollo y cotidianidad.
Poder afrontar con valores cristianos esta realidad de la cuarentena, que en muchas personas a incidido de manera negativa hasta llegar a incrementar la violencia intrafamiliar, depresiones, crisis, stress, enfermedad, agotamiento entre otras realidades físicas y psicológicas.
Sin embargo, viviendo la fe; se fortalece el ser humano, se llena de esperanza, paz y amor, que solo Dios puede brindar ante estos momentos duros que se viven durante la pandemia.
También se argumentó, el riesgo de suprimir empleos directos que la Iglesia católica ofrece a tantas familias de todas las regiones del país por estar cerrados e inactivos; entre otros muchos aspectos que fueron estudiados y avalados por el Gobierno.
Por Guillermo Romero
Siga a Periodismo Público en Google News. Suscríbase a nuestro canal de Whatsapp