Corporación Nuevo Arco Iris asegura que sí hay Bacrim en Cundinamarca

Contrario a lo afirmado por el gobernador Álvaro Cruz, el investigador de la Corporación Nuevo Arco Iris, Ariel Ávila, aseguró que hechos como la muerte del patrullero en Usaquén y el secuestro y asesinato de un estudiante de la Universidad Sergio Arboleda, son señales de que hay estructuras de delincuencia organizada en Cundinamarca y Bogotá.


El investigador aseguró que las bandas delincuenciales de Los Pascuales y Los Tarazonas se instalaron en municipios como Yacopí, La Palma y Soacha.

No obstante, Ávila aclaró que no se trata de bandas criminales como las que operan en Antioquia o Córdoba, e hizo un llamado de alerta a la Policía y el Ejército debido a que estas pequeñas Bacrim son las que manejan el microtráfico y la extorsión en toda la región.

“Los Pascuales y Los Tarazonas le compran la droga que venden en Bogotá a reductos de Los Rastrojos y narcotraficantes de los Llanos Orientales, lo preocupante es que en el occidente de Cundinamarca se instalaron Bacrim en municipios como Yacopí y La Palma, incluso Soacha”, finalizó.

Fuente: Caracol radio

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