Crisis hídrica en Bogotá: embalses de Chingaza no alcanzan la meta de recuperación
El nivel de los embalses del sistema Chingaza cerró 2024 con solo un 46 % de capacidad, lejos del 70 % esperado. La sequía y el racionamiento preocupan a las autoridades y ciudadanos.
Crisis hídrica en Bogotá, una problemática que se agudizó al cierre de 2024 y marca un inicio de año con retos importantes. A pesar de las medidas implementadas por el alcalde Carlos Fernando Galán, los embalses Chingaza no alcanzan la meta de recuperación, y son los responsables de abastecer de agua a más de 8 millones de habitantes, para la época decembrina alcanzaron solo un 46 % de su capacidad, lejos del 70 % que se esperaba lograr para diciembre.
El fenómeno del Niño y una temporada de lluvias menos intensa de lo previsto impactaron directamente los niveles de agua en los embalses en 2023. Aunque el racionamiento, que comenzó en abril y dividió la ciudad en nueve zonas con cortes programados, ayudó a moderar el consumo, no fue suficiente para revertir la tendencia. Según las autoridades, si los niveles caen al 36 %, Bogotá podría enfrentar lo que el alcalde Carlos Fernando Galán denomino como el «día cero», un escenario que implicaría racionamientos aún más severos.
La preocupación se intensifica dado que enero y febrero suelen ser meses secos, lo que incrementa el riesgo de incendios forestales, como los que afectaron los cerros orientales el año pasado. Los bomberos, además, enfrentarían dificultades para atender estas emergencias con recursos limitados de agua.
A pesar del panorama, las autoridades han resaltado ciertos avances. Miguel Silva Moyano, secretario general de la Alcaldía, destacó que el sistema Chingaza comenzó 2025 con un nivel de 46,6 %, superior al 41,12 % registrado en el mismo periodo del año anterior. Natasha Avendaño, gerente del Acueducto de Bogotá, también subrayó los esfuerzos ciudadanos para reducir el consumo durante las vacaciones de fin de año, logrando descender a 14,26 metros cúbicos por segundo.
En cuanto a soluciones a mediano plazo, para solucionar la crisis hídrica en Bogotá la Alcaldía trabaja en la ampliación de la planta Tibitoc, que opera con embalses del sistema norte, como Neusa, Tominé y Sisga, los cuales mantienen niveles más estables. Además, se adelantan proyectos para aprovechar el agua lluvia, descontaminar el río Bogotá y proteger los ecosistemas estratégicos como páramos y humedales.
Foto: Alcaldía de Bogotá
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