El abanico de aspirantes

Algunos medios de comunicación local han venido anunciado con cierta cautela durante los últimos días los nombres del abanico de aspirantes a la alcaldía de Soacha que se comienzan a mencionar y conformar tempranamente en diferentes espacios. Otros, por el contrario, han realizado entrevistas a varios personajes de la política municipal para tratar de identificar algunas “intenciones” de sus aspiraciones de poder. El ejercicio de realizar desde mediados de años una lista propia no ha sido infructuosos del todo. Algunos de los nombres de los aspirantes que ya se empiezan a mencionar coinciden con mi lista aunque quizá no el número total de ellos.


En el abanico hay tres ex alcaldes con los mismos insatisfechos e impúdicos deseos de ser nuevamente gobernantes. Uno de ellos viene precedido de cumplir una sanción penal y disciplinaria relacionada con su gestión de gobierno como su mejor carta de presentación. El segundo, procede de la vida mundana, un ex sacerdote, que ungido por el poder del nuevo mesías colombiano, aspira a redimir del pecado a sus descarriadas ovejas para cambiar el apocalíptico destino del municipio. Y para redondear el cartel, me refiero al de aspirantes a la alcaldía por supuesto, se lanzará al ruedo un reconocido ex maletilla que ya disfrutó de las mieles del triunfo pero no precisamente taurino y que es en parte responsable como los dos primeros de la debacle actual del municipio.

Se especula incluso que podría presentar su aspiración un ex alcalde del municipio de Granada que se segregó del territorio de Soacha por la pésima gestión de los alcaldes de la época y que ahora aspira o piensa ser su mandatario.

En este abanico de múltiples y diversas aspiraciones se encuentra un ex concejal, ex aspirante y ex funcionario del departamento de Cundinamarca, quien a la sombra del cargo que ostentó, hará su tercer intento para “refrescar” la política en Soacha. ¿Será que correrá la misma suerte del eterno candidato conservador Álvaro Gómez Hurtado. (Q.E.P.D)?

Y no es menos seria las serias aspiraciones de un ex secretario de educación que durante seis años largos preparó las condiciones y sobre todo los recursos económicos para su campaña; y no falta quienes hayan hecho incluso conjeturas sobre la eventual aspiración de una ex primera dama o ex gestora social, como llaman ahora a las esposas de los alcaldes.

Como de todo hay en la viña del señor, un ex rector y ex docente también tiene serias pretensiones, quizá convencido de lo infructuoso que le ha parecido trasformar el mundo con la pedagogía para intentar hacerlo ahora desde la política.

En el listado no podía faltar un reconocido galeno raizal, que con su breve paso por el primer cargo municipal, decidió con más convicción cambiar los principios de Hipócrates por los de Maquiavelo. Ahh, olvidaba otro ex, un ex miembro del Consejo Consultivo de Gobierno de la actual administración, de quien se dice, es el candidato del primer mandatario quien fue promocionado reiteradamente durante los dos primeros años de gobierno de la actual administración y tiene serias intenciones de buscarle remedio y tratamiento a la problemática del municipio que agobia a la ciudadanos.

No podría faltar un concejal que recientemente presentó su renuncia que oscilando entre el mundo terrenal y espiritual, quiere, aunque con pocas probabilidades, pastorear las ovejas desde el quinto piso donde las puede ver mejor.

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