El microtráfico le gana la batalla a las autoridades de Soacha
La venta de droga en parques, casas de expendio, a domicilio y en las afueras de los colegios y conjuntos residenciales, se convirtió en el mayor flagelo que vive la ciudad, ya que del consumo de estupefacientes se desprenden otros problemas como los atracos, raponazos, asaltos y toda clase de robos. La comunidad dice que las autoridades no actúan con rapidez.
Constantemente la comunidad hace denuncias sobre la venta de drogas en diferentes sitios de la ciudad, pero no se evidencia que las autoridades respondan a ese clamor ciudadano.
“Aquí se la pasan varios jíbaros vendiendo droga, incluso rondan el colegio y están pendientes cuando los estudiantes salen de clase. Eso lo observa uno todos los días y la policía sabe pero no hace nada”, explicó un residente cercano al parque de San Mateo.
Y es que la venta de pequeñas dosis está presente hasta en el parque central de Soacha. Por lo menos así lo denuncian algunos residentes, quienes observan que en las esquinas hay distribución de drogas.
“El problema es la dosis mínima porque muchos de los expendedores cargan pequeñas papeletas y hacen varios viajes a pie o en bicicleta para no llevar grandes cantidades y no tener líos por si la Policía los coge. Eso lo ve uno hasta en el parque de Soacha, hacia el colegio María Auxiliadora”, reveló un joven vendedor de dulces.
Pero la venta de droga cobija a todos los sectores del municipio. La más reciente denuncia se dio en Parque Campestre debido a que los expendedores llegan hasta las afueras del conjunto y por las rejas atienden a sus clientes, sin que la policía haga lo necesario para evitarlo.
“Por aquí es constante ver que llegan algunos jóvenes a vender droga y la pasan por las rejillas del conjunto, con el agravante que muchas veces son menores de edad, incluso niños de 13 años los que salen a comprar. Pedimos a las autoridades atender la situación, poner un CAI cerca o hacer rondas frecuentes para desterrar a estos delincuentes”, denunció un habitante de la urbanización.
Si bien las autoridades han dado golpes contundentes a bandas dedicadas al microtráfico, los habitantes de Soacha consideran que es deficiente la labor de la Policía, pero también hacen un llamado a la justicia para que a la hora de imponer penas, sean más ejemplares.
Por ahora, las denuncias continúan y los expendedores siguen distribuyendo drogas ilícitas sin que las autoridades hagan lo pertinente para detener este flagelo que está afectando a la comunidad, especialmente a niños y jóvenes.
Foto: elobservador.com
Siga a Periodismo Público en Google News. Suscríbase a nuestro canal de Whatsapp