Desmantelan laboratorio productor de coca

La Policía Nacional, en atención a la Estrategia de Intervención Integral contra el Narcotráfico y la SIJIN de Cundinamarca, desmanteló un laboratorio artesanal para la producción de clorhidrato de cocaína ubicado en la vereda Siabita, jurisdicción del municipio de Guayatá (Boyacá) en límites con Cundinamarca.


Gracias a la oportuna información suministrada por la red de cooperantes, la Policía Nacional con un grupo especial de la Seccional de Investigación Criminal ubicó y desmanteló un campamento en medio de una zona boscosa y rústica, el lugar estaba construido con madera y plástico utilizado para almacenar implementos y elementos químicos al igual que se halló una vivienda acondicionada como laboratorio para la producción de alcaloides, en la cual se procesaban y cristalizaban semanalmente más de 100 kilos clorhidrato de cocaína.

Los investigadores con ayuda de un canino antidrogas, revisaron minuciosamente los implementos allí encontrados y dentro del depósito de insumos, hallaron 50 kilos cocaína y 42 kilos de base de coca, 1650 galones de insumos químicos, mas de 500 kilos de insumos sólidos, 10 microondas y dos planchas con logo símbolos de un caballo y una mariposa.

En el operativo los investigadores hicieron las pertinentes diligencias de identificación preliminar de sustancias y luego de la respectiva toma de muestras, destruyeron e incineraron el campamento en presencia de autoridades municipales y judiciales, luego de la respectiva elaboración de las actas, los elementos incautados fueron dejados a disposición de la fiscalía seccional de Guataqué Boyacá.

Los narcotraficantes aprovechan la condición económica de los campesinos a quienes mediante engaños y dádivas les toman en arriendo las fincas y las utilizan para construir infraestructuras artesanales acondicionadas para el procesamiento y producción de alcaloides.

Así mismo utilizan una nueva modalidad denominada “cadena de producción” y “laboratorios exprés” los cuales son diseñados y construidos para su fácil desmonte y traslado en zonas boscosas y rústicas donde ubican los campamentos para el procesamiento final del alcaloide y traen de otros departamentos la base de coca para evadir la acción de las autoridades.

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