Familiares de Jonathan Galindo insisten que su muerte se produjo por negligencia del Hospital
Nuevamente los familiares del joven Jonathan Galindo, fallecido el pasado primero de enero en el Hospital Mario Gaitán Yanguas, culparon a la institución de salud por la atención prestada al momento de la emergencia.
Los familiares insisten en que la atención no fue la adecuada, ya que la única recomendación que hizo la enfermera de turno fue que el paciente se tomara una ‘bomba’ para el alicoramiento, pero cinco minutos después falleció.
“Desde todo punto de vista hubo negligencia, nosotros decimos que esos cinco minutos fueron vitales para él. Con los síntomas que Jonathan llegó, quejándose ante la enfermera porque le dolía su costado izquierdo y su pecho, era para que hubieran tomado medidas y corroborado los síntomas con el médico de turno, no jugando como lo hizo la enfermera y mandándolo a que simplemente se tomara un Alka Seltzer y una Bretaña, porque-según ella-los síntomas eran producto del alicoramiento que tenía. Lo mandó para la casa pero a los cinco minutos le dio el infarto y falleció”, explicó Jorge enrique Galindo, tío de la víctima.
Pero para el director del hospital, John González, el procedimiento de la enfermera se hizo acorde a las circunstancias que el paciente presentó. Considera que de acuerdo a la historia clínica, la enfermera procedió correctamente porque los síntomas no eran de alarma ni mucho menos para pensar que el paciente iría a fallecer.
“El paciente ingresa por un grado de alicoramiento y sus signos vitales respondían a unos cuadros que no representaban gravedad, razón por la cual la persona que realiza la valoración lo clasifica dentro de una atención cuatro o no prioritaria, es decir que como su cuadro no mostraba gravedad, se podía atender posteriormente. Se le da salida al paciente, pasaron unos minutos muy cortos, (No fueron más de 7-8 minutos) de acuerdo a la historia clínica. Cuando regresa ya es un paciente que no presentaba signos vitales, o sea que en ese tiempo tan corto, lastimosamente se presenta algo que se llama muerte súbita, pero en este caso el hospital respondió al manejo adecuado”, argumentó el director de la institución de salud.
La muerte del joven Jonathan Galindo se revive un mes y nueve días después ya que el director del Hospital fue citado ayer al concejo municipal para que explicara este caso tan sonado en Soacha, y aunque el Dr. González insiste en que se procedió correctamente, los familiares de la víctima reiteran que hubo negligencia.
“Es que lo que nosotros alegamos es la negligencia por parte del Hospital. Esos cinco minutos fueron vitales. Lo hubiera atendido el médico de turno la situación sería diferente, le hubieran dado reanimación inmediata, le hubieran prestado la atención adecuada y no haber esperado a que cayera en la calle, como lo corrobora el agente de policía que lo alzó cuando le dio el infarto, todas esas cosas las estamos hablando porque queremos que se saque a la luz pública esta negligencia de la enfermera de turno. Nosotros lo que queremos es alertar a la población para ojalá no le suceda lo mismo a ninguna otra persona del municipio”, indicó el tío de Jonathan.
Sin embargo el director del hospital dio a conocer apartes del informe de Medicina Legal que asegura que la muerte del joven Jonathan se presentó por un Infarto Agudo del Miocardio, lo que generó la muerte fulminante del paciente. Dijo que incluso el mismo reporte solicita unos estudios adicionales a los familiares, por ser un caso presentado a una persona demasiado joven.
La familia de Jonathan inició acciones legales en contra del Hospital y cuestiona la actitud de sus directivas por la poca atención al caso. “Hasta ahora conozco al Dr. Jhon y me sorprendió que me tocara tantos temas que ellos decían que desconocían y que nosotros sí los teníamos de primera mano”, indicó don Jorge Enrique.
A este caso se suma la cantidad de quejas que a diario se escuchan del Hospital Mario Gaitán Yanguas, no sólo por situaciones lamentables como la de Jonathan, sino relacionadas con todos los servicios que presta la institución de salud. No obstante el director explicó que a pesar del inconformismo reportado, el porcentaje de satisfacción es del 95% de una institución hospitalaria que está atendiendo aproximadamente 120 casos diarios en el servicio de urgencias.
El director dio a conocer la cruda realidad del Hospital y explicó que es muy difícil prestar un buen servicio, sin los elementos y el presupuesto adecuado:
“Lastimosamente nuestra infraestructura y capacidad de respuesta no es la mejor, razón por la cual uno, dos o tres pacientes seguramente no logran lo que requieren. Hay que decir que nuestro sistema de salud nos está obligando a llevar una serie de procesos que enredan la atención, pero adicional a nuestra infraestructura y capacidad de respuesta, que ya se quedó corta, ya no tenemos dónde ubicar un consultorio más, de ahí la necesidad imperiosa de que Soacha tenga una nueva infraestructura para poder realmente responder ante las necesidades de la comunidad. Nosotros tenemos en este momento un centro hospitalario en el servicio de urgencias con 40 camas de observación y con la población del municipio se deberían tener más de 120 camas de observación, por lo tanto estamos frenados por condiciones de infraestructura; sin embargo se ha buscado que el paciente que requiera atención, independiente de las incomodidades, se atienda”, concluyó.
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