Habitantes de la calle invadieron el barrio La Despensa

Preocupada se encuentra la comunidad del barrio La Despensa debido al incremento de la población habitante de calle que en los últimos meses ha llegado a su sector. Aparte de ser un drama social, la situación ha repercutido en el aumento de la inseguridad y el consumo de drogas, fenómenos que están directamente asociados con la presencia de delincuentes que cometen sus ilícitos en el sector.


Según cuentan los mismos vecinos, el problema se ha agudizado desde que el año pasado fue retirado el puesto de Policía que durante más de 50 años operó en el sitio, pues desde aquel entonces no se ha buscado ninguna otra alternativa para que la fuerza pública esté presente en el lugar, aparte de un CAI que no responde completamente a las expectativas de la comunidad:

“Desde el año pasado, cuando la Policía del barrio La Despensa fue retirada del puesto que tradicionalmente había ocupado en el sector, se ha incrementado mucho el expendio y el consumo de drogas en el parque. Aparte hay muchas personas habitantes de la calle que vienen a hospedarse en el parque todas las noches, llegan a dormir a eso de las 3:00 o 4:00 am, y se levantan al otro día entre las 12:00 m y la 1:00 pm, impidiendo que la gente pueda venir a aprovechar el parque. Tenemos dos cámaras de seguridad y a pesar de la gran inversión, de poco sirven. Este debería ser un sector muy seguro, pero no es así. Incluso en el puente peatonal se han presentado varios atracos”, explicó Julio Ordóñez, Presidente de la JAC de La Despensa.

Para Ordóñez, las autoridades deben ver la necesidad que hay en el barrio, pues aseguró que no es una limosna lo que están pidiendo, sino un derecho que tienen para poder vivir tranquilos y seguros. De acuerdo al Presidente de la JAC, llevan más de un año solicitando que se tomen medidas, pero hasta el momento no han visto resultados para que la Policía vuelva al barrio como antes.

A lo anterior debe sumarse que en el parque de La Despensa y el puente vehicular, apenas hay dispuestos 5 auxiliares bachilleres, que poco o nada pueden hacer ante la compleja problemática que se presenta, porque a pesar de que a escasa media cuadra de este sitio hay un CAI móvil con patrulleros de la Policía, estos permanecen prácticamente al margen de lo que sucede cerca de ellos.

“Hay poca seguridad y mucho habitante de la calle, además de consumidores de droga y atracadores. En el puente peatonal roban a muchas personas, y las cámaras de seguridad no han servido de mucho porque el inconveniente sigue como si nada, estas personas continúan acá sin ningún problema”, expresó Luis Figueroa, habitante de La Despensa.

“No se ve la presencia de la Policía, y es mucha la indigencia que llega todos los días al parque de La Despensa, eso es un peligro para la gente que llega tarde o sale temprano para su trabajo. Acá uno ve muchos consumidores de drogas, y a pesar de que yo cierro mi negocio por la tarde y no sé qué pasa por la noche, casi siempre escucho que atracan a personas que pasan por el parque, al igual que ocurre en el puente, donde también han ocurrido muchos atracos”, concluyó Anita Mojica, comerciante de La Despensa.

Más allá de lo que sucede en La Despensa, lo cierto es que en los últimos meses Soacha se ha convertido en el punto de encuentro de decenas de habitantes de la calle, que al parecer provienen de la capital del país, y se han asentado en diferentes puntos de la ciudad, generando no sólo incomodidades y preocupaciones a la comunidad, sino también una aguda problemática que empeora la situación social que vive el municipio.

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