Habitantes de Soacha cuestionan realización de nuevo puente peatonal
Tres puentes peatonales en menos de cuatro cuadras es algo que no le cuadra a muchos residentes de Soacha, cuando en otros lugares de la Autopista Sur hacen falta construcciones similares. Sin embargo hay que decir que el que se construye frente al barrio Camilo Torres, obedece al resultado de una acción popular.
La estructura que se adelanta en la carrera cuarta con calle 25 genera ciertas dudas e inconformismos a los transeúntes debido a que se ubica cerca a los puentes de Transmilenio en San Mateo y calle 22, siendo este último uno de los que los habitantes poco utilizan, ya sea por su extensión, falta de cultura o por cuestiones de seguridad.
“A mí me parece una obra innecesaria porque a cuadra y media tenemos dos puentes. Más bien esa platica debieron haberla invertido de aquí para allá, es decir, hacia Compartir porque en ese tramo falta mucho puente”, dijo Nicol Duarte, residente en la comuna dos.
Pero quienes se movilizan constantemente entre los barrios Camilo Torres y La amistad consideran dicha obra necesaria, aunque les genera ciertas dudas por aspectos a futuro:
“Soy habitante del barrio La Amistad y me parece bueno que se haga este puente porque permite que tanto del Camilo Torres como de aquí nos movilicemos mejor. Lo que no quiero es que lo cojan de baño público como el de San Mateo porque allá venden comida y es muy desaseado”, manifestó Cristóbal Cárdenas, quien reside y trabaja en el sector.
Esta nueva estructura es resultado de un fallo popular dado en el año 2002 a favor de la comunidad. Èver Méndez, coordinador de proyectos de Transmilenio Soacha, comentó: «Se dividió en puntos vulnerables de alta accidentabilidad en el corredor de la autopista, en ese entonces el fallo salió a favor de las personas del municipio y le ordena a INVIAS la construcción de quince puentes sobre la autopista en la jurisdicción del municipio de Soacha; este puente hace parte de esa acción popular, el sitio lo definieron en su momento en puntos de mayor accidentalidad».
Frente a las inquietudes que los habitantes poseen, Méndez añadió: «De pronto la inquietud de la comunidad es la cercanía de un puente a otro, pero hay que aclarar que algunos coinciden con el proyecto Transmilenio y otros son producto de esa acción popular”.
La función de este nuevo puente peatonal es disminuir la accidentalidad. El municipio no es el que se encuentra supervisando la estructura, es la ANI la que está a cargo de la construcción, por lo tanto esta entidad realiza el seguimiento a la ejecución del proyecto.
Por: Steffany K. Rodríguez Jiménez
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