Indignación en Sabana Ciprés por incumplimiento de la constructora

La indiferencia de un municipio que les ha negado casi todo, incluso hasta un servicio de agua potable digno, ha significado un calvario para los residentes de sabana Ciprés en la comuna seis, quienes se arrepienten de haber comprado en un sitio que no cuenta con las condiciones de vida que les habían prometido.


Cuando Francisco Sánchez recibió su apartamento en Sabana Ciprés, pensó que parte de sus necesidades se resolverían de manera más fácil, pero al contrario, surgieron otras nuevas porque el conjunto residencial no cuenta con un sistema de acueducto propio. La única vía de acceso es un peligro, las divisiones internas entre los residentes que desean imponer sus condiciones son frecuentes y la falta de escenarios recreativos para los niños, sumado a la alta cuota que debe pagar por vivir allí, son algunos de los problemas con los que él y los habitantes de este sector de la comuna seis, deben lidiar a diario.

“Yo me siento desilusionado, siento que la constructora M y H Sabana Ciprés se aprovechó de mi buena fe, de mi ilusión de tener apartamento porque nos vendieron un proyecto que ellos no nos podían ofrecer, siento que hubo mucha improvisación, que no tienen ni la más mínima idea de todo el daño que le están generando a todas las personas que creímos en el proyecto, y yo personalmente, a pesar de que quiero ver crecer el conjunto, no estoy en condiciones de recomendarle a nadie que compre acá”, apuntó el señor Francisco.

Hay que decir que son tres etapas las que ya llevan entregadas a los residentes, que confiados en tener un apartamento propio, van y compran allí, sin saber que todavía el conjunto residencial no cuenta con personería jurídica, que algunos vecinos con ansias de sobresalir, o quizás con el desespero de querer arreglarlo todo de manera individual, se disputan el control administrativo de Sabana Ciprés, impidiendo que el trabajo mancomunado aflore de manera continua.

“El hecho de tener que pagar una cuota tan alta, cerca de $500.000 mensuales, casi que un salario mínimo, duele porque las familias venimos con la ilusión de empezar una nueva vida. A mí personalmente me ofrecieron acceder a una tasa de interés subsidiada que el gobierno la estaba dando en su momento, pero por el incumplimiento de la constructora, que se demoró tanto en la entrega del apartamento, cuando me salió ya no había subsidio para mí”, dijo otro de los residentes.

Además de las problemáticas anteriormente mencionadas, vale la pena decir también que la administración municipal ha sido indolente frente a situaciones concernientes a seguridad y transporte, ya que significa una misión casi que imposible acceder al conjunto residencial, sobre todo en horas de la noche, teniendo en cuenta que la calle 22 está pavimentada hasta la carrera primera aproximadamente, y de ahí en adelante hasta la carrera 11 este, hay que pasar por partes oscuras y desoladas, propicia para el consumo de drogas y los atracos. Así mismo, el único paradero de buses que había lo quitaron, relegando a los habitantes de este conjunto su acceso a la movilidad.

Como si fuera poco, a los residentes de Sabana Ciprés también se les está negando el derecho al servicio de agua potable, ya que ellos manifiestan que debido al incumplimiento de las promesas efectuadas por los constructores, todavía llegan carrotanques a repartir agua en determinadas horas del día, por lo que las personas se ven obligadas a inhibirse de disfrutar en ocasiones de los beneficios que esta trae.

“El hecho de que traigan agua en un carrotanque no quiere decir que nos hagan un favor, que es lo que nos da a entender la constructora, y si nos ponemos a mirar ni siquiera sabemos de dónde proviene esta agua, ni qué tan bueno es el mantenimiento que le hacen a los carrotanques por dentro”, dijo Sonia Tovar, otra de las habitantes de Sabana Ciprés.

Por último, también se menciona que al momento de conversar con los residentes, se encontraban miembros de la constructora, quienes dijeron que en el transcurso de esta semana se inician las obras de instalación de acometidas para que los moradores reciban por fin el servicio de acueducto; de igual manera, también habían funcionarios de la secretaría de Planeación realizando una inspección técnica.

Por lo pronto, residentes como don Francisco aguardan una pequeña esperanza de que en medio de todos estos inconvenientes, el conjunto crezca en cuanto a infraestructura, servicios y seguridad. Eso sí, dice que de momento no le recomiendan a nadie comprar en este sitio, para que no caigan como él y otras familias, en un engaño total.

Siga a Periodismo Público en Google News. Suscríbase a nuestro canal de Whatsapp