¡O nos unimos o nos jodimos! 2.0

Posted on 25 de septiembre de 202310 de octubre de 2023 by Periodismo Público

Por Johan Pérez

Hace 7 meses escribía sobre la primera carta que se destapaba para las elecciones a Alcaldía de Soacha de este año y era la apuesta del actual gobernante con Darlin Lenis.

En ese momento se veía como una decisión nefasta que finalmente no tuvo mayor eco porque Lenis no recibió aval y tuvo que dar un paso al costado.

Hoy la situación parece ser más preocupante que la de meses atrás, ya con 10 candidatos oficialmente inscritos; la carta de la administración cambio de cara, pero no de forma, ahora es el exsecretario de gobierno de Saldarriaga, Danny Caicedo.

Caicedo de 33 años puso su nombre a consideración tras los problemas de aval de Lenis y desde ese día empezó la campaña que muchos califican de descarada hacia el quinto piso del palacio municipal.

Publicidad indiscriminada, denuncias de constreñimiento hacia contratistas, uso de escenarios públicos para hacer política, supuesta falsedad en documento, derroche de recursos para reuniones, entre otros, se convirtieron en el pan de cada día de la campaña liderada por el soachuno.

Estamos completando el segundo mes desde que se cerraron las inscripciones y el malestar de la ciudadanía no cesa, pues pareciera, como lo indicamos semanas atrás, que el favorito fuera el que más vallas ponga y volantes reparta.

Es tal el malestar público y político con Juan Carlos Saldarriaga que hoy dos de sus «escuderos» al inicio del gobierno, como lo eran Mario Ballen y Jhon González, también son candidatos y junto a un gran número de líderes que lo respaldaron en 2019, hoy ondean otras banderas.

A estos dos se suman el diputado Julián Sánchez ‘Perico’, la excongresista Betty Zorro, el exalcalde Jesús Ochoa, el exconcejal Camilo Nemocón, el concejal Heiner Gaitán y los líderes Luis Agudelo y Freddy González como los 9 contrincantes que deberán derrotar en las urnas a Caicedo.

Pero como dijimos hace 7 meses, no nos vamos a centrar en los desaciertos de Saldarriaga porque podríamos durar horas y horas escribiendo; vamos a mirar al horizonte y a lo que se avecina, que termina siendo las elecciones del 29 de octubre de este año.

Parece ser momento de empezar a mirar las encuestas que terminan siendo termómetros para ganar votos de opinión, apenas se han conocido dos oficiales y en una la ganadora es Betty Zorro y en la otra, ¿adivinen? Sí, Caicedo, pero eso no saca de la baraja a nombres como el de Camilo Nemocón, ‘Perico’ o el mismo Heiner Gaitán. Finalmente, la única encuesta válida será la del 29 de octubre.

Solo se espera que ese día no se premie al gobierno de los endeudamientos, al gobierno que inició la persecución por arrebatarle sus casas a los soachunos con un impuesto predial desmesurado, al gobierno de la prepotencia y los rifirrafes con el gobierno nacional y distrital, y sobre todo, al gobierno que le dio mil millones de pesos a un equipo foráneo para que a las dos semanas tuviera que ir a jugar como local un partido en Chía.

Por eso desde este espacio de opinión hacemos dos llamados (por segunda vez): el primero, a que ese puñado de nombres que suenan para llegar a la alcaldía se unan para que haya un candidato único y todas las fuerzas políticas se vayan para esa orilla, sin importar si se trata de derecha o izquierda. Acá solo debe importar el bien común, que es Soacha, y no fraccionar votos por diferentes líneas para que cualquiera con una insulsa votación logre llegar al poder.

La unión es la única opción de llevar un nuevo líder a la alcaldía de Soacha o, si no, Saldarriaga lo vuelve hacer, y eso lo demostró en las elecciones parlamentarias donde supo jugar bien sus fichas y montó a la señora Liliana Rodríguez de representante a la Cámara, que, a propósito, a veces da pena que ni siquiera sabe lo que dice, es decir, de preparación poco o nada para ocupar tal cargo, algo que no ha cambiado en más de un año como congresista, pero una vez más se demostró la sagacidad de este hombre, que quiere seguir gobernando en cuerpo ajeno.

El segundo llamado es a renovar el Concejo, si bien hay algunos nombres que se han destacado y quizás tienen la fuerza política para continuar en el cabildo, sí es urgente sacar una cantidad de vagos que a cambio de «cariñitos» aprueban todo lo que el gobierno presenta; por ese lado también se alistan unos cuantos delfines que, si bien cambiarían de rostro y nombre, llegarían con las mismas prácticas.

A despertar ciudadanos, a dejar de ver las elecciones como un proceso efímero y desligado de nuestro día a día, estamos a tiempo de recomponer un camino que en realidad lleve a que la ciudad avance. O nos unimos o nos jodimos.