Una persona murió en estación de Transmilenio: esto se sabe
Un nuevo episodio de violencia en el sistema Transmilenio volvió a encender las alertas entre las autoridades y los usuarios, tras un hecho ocurrido este fin de semana.
Testigos aseguraron que dos personas se enfrentaron con armas blancas tras descender de un bus. El agresor escapó y fue activado un plan candado para encontrarlo.
Las autoridades de Bogotá intentan esclarecer las circunstancias de la muerte de una persona en la estación temporal de TransMilenio ubicada en la calle 34 con avenida Caracas, en un hecho registrado hacia las 7:20 de la noche del viernes.
El episodio, catalogado inicialmente como un caso de intolerancia, generó preocupación entre los usuarios, que manifestaron temor ante nuevos hechos de violencia dentro del sistema.
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Según la información divulgada por CityNoticias, el incidente ocurrió minutos después de que dos personas bajaran de un bus articulado.
Testigos relatan cómo ocurrió la agresión
Quienes se encontraban dentro de la estación contaron a los uniformados que ambos individuos iniciaron una riña y se atacaron con armas blancas. En medio del forcejeo, una de las personas cayó al piso con heridas graves, mientras el otro hombre huyó del lugar.
El mayor Andrés Melenje explicó que, al llegar, los policías recopilaron las versiones sobre la discusión que habría desencadenado la pelea. Los testigos aseguraron que todo sucedió rápidamente, justo después de descender del articulado.
Las autoridades confirmaron que la víctima presentaba múltiples lesiones con arma cortopunzante. En el sitio se le brindó atención básica mientras se esperaba el arribo de los investigadores judiciales.
Acciones tras el hecho
La Policía acordonó el área y permitió el ingreso de los peritos encargados de inspeccionar la escena y recolectar evidencia para esclarecer el caso. De manera paralela, se activó un plan candado para ubicar al presunto agresor, quien logró escapar en medio de la confusión.
TransMilenio, por medio de un comunicado, lamentó lo sucedido y rechazó el acto de intolerancia. La entidad afirmó que entregará toda la información necesaria para apoyar la investigación y confirmó que el hecho no ocasionó afectaciones operativas.
El caso reavivó la preocupación de algunos pasajeros. María Paila Ibáñez, una usuaria consultada, afirmó que la presencia de uniformados es insuficiente en ciertas estaciones. “A veces en las estaciones no hay los suficientes policías como para alertar a tiempo”, dijo.
Otros ciudadanos coincidieron en que el ingreso irregular y los comportamientos agresivos dentro del sistema generan inseguridad, sobre todo en la noche.
De acuerdo con las primeras hipótesis manejadas por las autoridades, los dos involucrados serían habitantes de calle, aunque la investigación continúa para determinar con claridad los hechos y establecer responsabilidades.
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Mientras avanzan las indagaciones, usuarios y expertos han reiterado la necesidad de reforzar las medidas de seguridad en estaciones y buses, especialmente en puntos donde hay alta congestión o escenarios propensos a conflictos.
El episodio en la estación Calle 34 vuelve a poner sobre la mesa el debate sobre la convivencia en el transporte público y los desafíos que enfrenta Bogotá para prevenir hechos de violencia dentro del sistema.
Foto: Archivo Periodismo Público






