¿y a los ciudadanos quién nos defiende?

Terminando la lectura de noticias que marcaron estos últimos días retumba en mi cabeza esta pregunta por dos casos en particular:
1.- Los transportadores de Soacha organizan un paro para presionar al alcalde municipal exigiéndole que restituya el pico y placa al servicio público, pues según ellos están aguantando hambre por la gran cantidad de carros que circulan por los diferentes corredores viales, y
2.- Los taxistas de Bogotá planean un paro con el fin de obligar al alcalde Petro y su administración a restablecer el pico y placa anterior para los vehículos privados pues, como cosa rara dicho gremio esta ad portas de una anemia grupal.


Entonces al concluir dichas lecturas me asalta una reflexión a la que la verdad todavía no le encuentro respuesta y por lo cual me siento como en época de racionamiento o sea a oscuras, pero a la que confió algún amigo lector le dará luz en medio de tanta lagrima transportadora: ¿y a los ciudadanos quién nos defiende?.

Entonces ¿qué hacemos?, organizamos un plan tortuga y nos volcamos a la vías a caminar a paso lento para bloquear a los vehículos, o mejor salimos y de plano pues nos quedamos sentaditos en la calle y ahí sí que miren los transportadores ¿por donde circulan?, como les dije antes: la verdad no sé, ahora si les interesa saber el motivo de ánimo agresor pues sencillo, les contesto con otro par de preguntas:
1.-¿Será que el señor alcalde Dr. Nemocón y las autoridades de tránsito no podrían darse una vueltesita por los paraderos ubicados en jurisdicción de municipio en horas de la mañana?, o mejor aún a eso de las 5:00 de la tarde por los lados de la carrera 68 con calle 80, o por la calle 45 con 20, o la Boyaca con 80 ¿que para qué?, pues para que vean con sus propios ojos (esos ojos que nunca ven las calles desde el interior de un transporte público y menos en hora pico), como los transportadores que se están muriendo de hambre salen del paradero sin tabla, o con las puertas cerradas dejando a los usuarios con el desespero inminente de un regaño en el trabajo o un retraso en la U, situación que no cambia en el punto de retorno donde la situación no es muy diferente ya que a los mencionados señores no hay poder que los obligue a colocar inmediatamente la tabla de regreso y a recoger a los ciudadanos que después de un día de labores deben enfrentarse a una multitud que parece disputar una prueba de habilidad corriendo detrás del colectivo para ver en qué momento puede asirse a una manija que le dé el asidero suficiente para subir al vehículo. Ahhh y no falta el vivo que en inmediaciones de la 80 si voltea la tabla pero automáticamente se asoma por la ventanilla lateral la cabeza de un ayudante que advierte: “hasta Venecia no más mono” ah ¿que tal ahora toca pagar doble pasaje? Nooo ¿que tal?

Y 2.- ¿los taxistas de la capital?, será que alguien en la administración de impuestos me muestra el articulito donde dice que los compradores de vehículos pagamos un impuesto parcial o que únicamente estoy pagando el impuesto correspondiente a las horas comprendidas entre las 8:00 am y las 3:00 pm de lunes a viernes, ¿o es que la sobretasa a la gasolina y toda esa cadena de impuestos que me obligan a pagar uno de los combustibles más caros del mundo no alcanzan a darme el derecho de circular en mi carrito cuando yo lo necesito sino cuando un señor él sí sin pico y placa me deja?.

Entonces mis estimados vecinos y dolientes quedo pendiente de sus comentarios para ver si entre tantos alguno propone la solución a nuestro sufrimiento.

Siga a Periodismo Público en Google News. Suscríbase a nuestro canal de Whatsapp