A la Administración municipal le falta voluntad para legalizar barrios de la comuna seis

Desde hace varios años, líderes comunales del Divino Niño luchan contra viento y marea para recibir todos los beneficios que se supone debe llevar la administración municipal a los barrios legalizados. Sin embargo, aseguran que la única vez que los tienen en cuenta es cuando hay campañas políticas, pero pasando las elecciones nadie vuelve a visitarlos.


Así lo sienten los habitantes del Divino Niño, quienes a pesar de los ofrecimientos de la Alcaldía Municipal para pavimentar la vía principal de este sector que conduce desde la entrada del Altico hasta la Calle 3, no confían plenamente en la gestión del mandatario de los soachunos y mucho menos en un proceso de legalización del barrio que incluya el suministro de servicios públicos como el acueducto y alcantarillado, no solamente en las vías principales sino en las vías internas del barrio.

“En nuestro barrio hoy en día no contamos con vías pavimentadas ni con un acueducto legal, porque el que tenemos fue hecho por la comunidad que salimos a comprar unas mangueras y luego empezamos a hacerlo nosotros mismos. En cuanto al alcantarillado la Alcaldía logró hacer algo por la vía principal, pero las calles no tienen alcantarillado legal todavía y la pavimentación de nuestro barrio nunca ha sido posible porque no ha habido un apoyo como tal de las entidades públicas para lograrlo”, dijo el señor Jairo López, residente del Divino Niño.

“La verdad hablándolo a título personal, los políticos sólo se han acercado cuando estamos en campañas políticas, ahí sí llegan y hacen 10.000 promesas. Desde que yo vivo en el barrio hace diecinueve años no he visto que venga ningún funcionario público a preguntar qué se necesita para pavimentar el barrio, sólo cuando están en campaña política, de resto nadie. Para mí tanta corrupción que ve uno, que escucha y los malos gobernantes son los que nos tiene así de afectados y en un nivel bajo porque toda Soacha no está en óptimas condiciones como debería estar”, expresó Nidia Fonseca, vecina de la zona.

Consultando con los dirigentes comunales, se pudo establecer que por parte de la comunidad se está gestionando la pavimentación de las vías secundarias del Divino Niño, sin embargo, para ello se debe determinar si primero hay que cambiar el rústico pero único acueducto con el que se cuenta en el barrio y si las empresas de servicios públicos y la alcaldía están dispuestas a colaborar para estas obras de adecuación.

“El barrio no cuenta con pavimento, pero sabemos que ese es un tema un poco más complejo porque no hay redes de acueducto y alcantarillado, entonces sería ilógico pedir pavimento cuando las partes más importantes como el acueducto y alcantarillado no existen. Eso está en proyecto para hacer al menos los diseños, aunque la verdad no sé si eso basta para que nos puedan ejecutar el proyecto”, resaltó Myriam Uribe, presidente de la JAC del Divino Niño.

Uribe concuerda con la comunidad en que la paciencia es una de las virtudes que más se ha tenido con esta situación, ya que además de la falta de un acueducto medianamente decente para el barrio, se suma la ausencia de pavimento en las vías, lo que afecta de cualquier modo a la gente, ya sea cuando llueve porque el barro se acumula y es casi imposible transitar por las calles, o bien sea en clima seco porque el polvo acumulado ocasiona problemas respiratorios a los habitantes, sobre todo si son niños.

“Por lo pronto tener un poco paciencia, aunque el barro es terrible cuando llueve, claro que cuando no cae agua es peor porque la tierra se levanta. Por acá hay bastantes tiendas y pasan los carros de la gaseosa, la basura y es cuando dañan terriblemente lo poco que hay de vías. De todas formas exigimos que se nos tenga más en cuenta y que no seamos olvidados por la alcaldía”, concluyó la líder comunal.

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