Chapinero lidera la implementación de la Ley Antirruido: ¿un modelo para toda Bogotá?
La Alcaldía Local de Chapinero lidera la implementación de la Ley Antirruido, con el objetivo de encontrar un equilibrio entre la convivencia vecinal y las actividades comerciales.
Con la reciente sanción de la Ley Antirruido, Chapinero se perfila como el primer territorio piloto para su implementación. La alcaldesa local, Alexandra Mejía Guzmán, sostuvo una reunión clave con el autor de la norma, el representante a la Cámara Daniel Carvalho, y la organización Asobares, en la que se establecieron compromisos para avanzar en la fase pedagógica y construir consensos con el sector nocturno.
“Las soluciones se construyen en conjunto y hoy, junto con Asobares y el equipo del representante Carvalho, seguimos escuchando y entendiendo las dinámicas de la implementación de la ley. Chapinero ha logrado en estos meses trabajar no solo en pro de la comunidad, sino también en gestionar acuerdos y medidas que no afecten a los establecimientos comerciales”, aseguró Mejía Guzmán.
Durante el encuentro se acordó diseñar campañas educativas para explicar el alcance de la Ley Antirruido, los derechos de los residentes y las responsabilidades de los negocios, especialmente en zonas mixtas donde bares y restaurantes conviven con viviendas. La idea es establecer lineamientos claros que permitan reducir los niveles de ruido sin sacrificar el dinamismo económico de la localidad.
Por su parte, el presidente de Asobares, Camilo Ospina Guzmán, expresó el compromiso del gremio con la construcción de soluciones: “Estamos comprometidos para que los establecimientos comerciales puedan operar responsablemente y los vecinos puedan descansar. Queremos ser aliados en la implementación de esta ley”.
La Ley Antirruido busca principalmente garantizar el derecho a un ambiente acústicamente saludable mediante la regulación de fuentes de ruido. Con esta apuesta pionera, Chapinero espera convertirse en modelo para otras localidades de Bogotá y municipios del país que enfrentan retos similares en términos de convivencia y regulación del ruido.
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