Denuncian nuevo caso de negligencia médica en el Hospital Mario Gaitán

Sumado al caso presentado hace aproximadamente un mes cuando una recién nacida falleció en este centro hospitalario, hoy se presenta una denuncia por la aparente negligencia de los médicos con el hijo de Yemsy Cárdenas y Henry Pedraza, cuya gestación no había presentado inconvenientes hasta el pasado domingo cuando se informó que el pequeño había fallecido.

Según informan los padres del menor, durante los ocho meses de embarazo que alcanzó a completar la madre, esta siempre asistió cumplidamente a los controles prenatales sin que se hubiese presentado inconveniente alguno o signo de alarma que ameritara atención especial por parte del personal que estaba llevando el proceso de gestación. Sin embargo desde el pasado 22 de mayo la mujer embarazada empezó a presentar anomalías y padecimientos que llamaron la atención del padre, quien de inmediato se acercó al hospital para buscar atención y descartar cualquier alerta. En efecto la atención se dio oportunamente, pero lo que en ese entonces aseguraron los médicos fue que todo se trataba de ‘síntomas normales del embarazo’:

“Nosotros vinimos con mi esposa a urgencias el pasado 22 de mayo, ella estaba hinchada, tenía fiebre, vómito y estaba muy mal de salud. Ese día vinimos a las 3pm y hacia las 7pm me dijeron que le iban a dar salida por que supuestamente ‘todo estaba bien y no había complicación alguna’, según ellos ‘los síntomas que presentaba eran normales del embarazo’. Yo me la llevé para la casa confiado en lo que me habían dicho, pero el martes 24 asistimos a un control prenatal en el centro de salud Servisalud y continuaron afirmando que todo estaba bien, le ordenaron un monitoreo y la EPS Ecoopsos lo autorizó sólo hasta el 27 de mayo. Posteriormente le mandaron unos exámenes pero la EPS no los había autorizado todavía y ese mismo viernes me dieron la ‘sorpresa’ de que mi hijo había muerto y que llevaba así dentro del vientre más de tres días”, explicó Pedraza.

Durante el tiempo de gestación, la madre fue atendida por el Ginecólogo William Castelar, persona que de acuerdo a lo informado por el padre nunca advirtió el riesgo que se podía presentar en el embarazo y que luego del deceso, cuando fue a pedir una explicación sobre lo que había pasado y cómo había ocurrido, simplemente le insistieron que “un embarazo se podía complicar a cualquier momento y no me podían dar más detalles, además me informaron, sólo hasta ese instante, que el niño presentaba malformaciones en la cabeza, algo que jamás nos habían comunicado, pues los síntomas que presentaba mi esposa eran porque la niña ya estaba muerta dentro del vientre”.

Desde el pasado domingo, luego de que se practicara el parto y se descubriera que el pequeño estaba muerto, Pedraza y su padre Obdulio han iniciado un tortuoso proceso ante las autoridades del Mario Gaitán para poder obtener la historia clínica de Yemsy y procurar esclarecer los detalles de este lamentable hecho. Sin embargo esto no ha sido posible debido a que en el hospital manifiestan que la única persona que puede recibir esos documentos es la abuela materna del niño, dado que la madre es menor de edad:

“Me parece increíble que este hospital haga con la gente lo que ‘se le de la gana’, eso no debe ser así, estamos hablando de un ser humano, ¿por qué tienen que tratar a la gente de esa manera?, ¿por qué me entregan a mi nieto el día domingo sólo para ir a enterrarlo?, ¿por qué me dicen durante ocho meses que todo está bien y después me lo entregan muerto?. Es injusto que se haga eso con las personas y sé que no es la primera vez que ocurre esto, necesito respuestas para esclarecer lo que pasó y ahora me niegan conocer la historia clínica. ¿A caso tengo que dejar así, quedarme callado y no decir nada?. Mi hijo no está solo, merecemos respeto y exigimos nuestros derechos”, expresó el padre de Henry.

“Al hablar con Yaneth Corredor, Trabajadora Social del hospital, ella nos amenazó con llamar al Bienestar Familiar y a la Policía de Menores, porque supuestamente yo no tenía por qué estar viviendo con mi esposa por ser ella menor de edad. A causa de lo anterior no pude estar en el momento del parto y por supuesto tampoco tengo posibilidades de recibir información al respecto porque, según ellos, la única autorizada para eso es mi suegra”, indicó Henry.

Periodismo Público consultó con el Subgerente Científico de la institución, Dr. Gustavo Castellanos, quien aseguró que frente a este caso los médicos que estuvieron al tanto siempre permanecieron pendientes de cada detalle y signo de alarma durante el embarazo, y que cuando se detectó alguna anomalía siempre la consignaron en la historia clínica, además de advertir a los padres que ante cualquier irregularidad se acercaran de inmediato al hospital (algo que de acuerdo a lo que asegura fue omitido). De otra parte el Dr. Castellanos se refiere a dos controles prenatales que se practicaron el 26 de abril, en el cual se estableció que todo estaba con normalidad; y el 22 de mayo (día en que la pareja fue a urgencias), donde de igual manera se aseguró que el estado era satisfactorio. El Subgerente Científico señaló también que la madre dejó de sentir movimientos fetales el pasado 26 de mayo, pero que fue sólo hasta el 28 de mayo cuando (por cumplir con uno de los controles) asistió a consulta y fue ahí donde se dieron cuenta de la pérdida del niño, que de acuerdo a los datos del médico se produjo ‘más de 48 horas antes de la hospitalización’.

Escuche aquí la declaración completa de Castellanos: