Delincuencia común y organizada: ‘El estigma de Soacha’
A raíz de los rumores generados en las comunas cuatro y seis y luego de la noticia publicada en un medio de comunicación nacional sobre la presencia de bandas criminales en el municipio de Soacha, la población enfrenta un manto de dudas con relación al tema, aunque las autoridades afirmen lo contrario.
Para las autoridades locales es claro que lo que hay en Soacha son pandillas o bandas de delincuencia juvenil que hacen daño en determinadas zonas del municipio, y que se han venido incrementando por el profundo problema social que crece con el correr de los días en cada una de las comunas.
Según cifras globales, en Soacha existen más de 120 grupos de delincuencia juvenil identificados, un hecho bastante preocupante para las autoridades, más cuando el municipio no tiene diseñado un plan de acción inmediato que conduza a enfrentar esta delicada situación. Es evidente que a medida que crece la población, aumenta el número de ‘pandillas’.
La pregunta que surge entre los ciudadanos de bien del municipio es, si en cabeza del alcalde hay un plan que permita contrarrestar el crecimiento de estas bandas, más cuando en la administración anterior se aprobó la construcción de varios megaproyectos de vivienda que necesariamente aumentan considerablemente el número de habitantes en la ciudad.
Si bien es cierto las pandillas presentes en Soacha no portan armamento pesado o de segundo grado, como lo afirmó recientemente el secretario de gobierno, Óscar Rodríguez, la situación sí es crítica y se hace necesario actuar ya.
“Una banda organizada debe tener un armamento propio y resulta que aquí hay homicidios por arma blanca, por calibre 38 y el máximo es 9 mm, eso lo puede certificar Medicina Legal. Lo anterior nos da a entender que en Soacha no existen las denominas bandas criminales, aunque hay que reconocer que lo que sí hay son bandas de jóvenes o pandillas”, sostuvo el secretario.
Pero independientemente de la presencia o no de las denominadas ‘Bacrim’, el municipio enfrenta una situación crítica de inseguridad generada en el problema de ‘microtráfico’ y consumo, hecho que al parecer le ha quedado grande controlar a las autoridades.
Es cierto que todos los lunes se realiza un Consejo de Seguridad en Soacha para analizar la difícil situación y que recientemente la Policía dio un golpe contundente a la banda denominada ‘Los Paisas’ en Altos de la Florida, estos son hechos que resultan insuficientes frente al grave problema que crece aceleradamente.
Para muchos ciudadanos que no se atreven a hablar ni mucho menos a decir su nombre, en Soacha el problema no es si hay presencia de ‘Bacrim’ o no. “Aquí el problema es que la delincuencia tiene el control total de la zona y prácticamente estamos en manos de ellos. Mire por ejemplo lo que pasa aquí en el colegio, todos los vendedores de droga se hacen afuera a vender bazuco a los muchachos y nadie hace nada. Otra de las situaciones es que cada rato se agarran y forman unas batallas con palos, piedras, cuchillos y a uno le toca es esconderse, pero para el alcalde y las autoridades no pasa nada”, explicó *Pedro, habitante del sector de Julio Rincón en la comuna cuatro.
Otro habitante reveló que en Cazuca es normal conseguir armas de fuego a precios muy cómodos, muy independiente de la norma que prohíbe su uso.
El reto ahora está en frenar el actuar de la delincuencia y será responsabilidad de las autoridades, en cabeza del nuevo alcalde, diseñar estrategias reales que detengan el crecimiento de los grupos de delincuencia juvenil, o de lo contrario Soacha se convertirá en un nido de ‘pandillas’ que lo único que hacen es sembrar terror y atacar a la población civil que ha creído en sus instituciones.
*Nombre cambiado
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