Las ‘chambonadas’ de la EAAB agotaron la paciencia de los vecinos de Nuevo Colón
Desesperados y con una inconformidad generalizada hacia la EAAB, se encuentran los habitantes de este barrio de la comuna cinco, que nuevamente ven cómo esta compañía se burla de ellos y justifica su ineptitud con irrisorias explicaciones que no caben en la lógica de estas personas, mientras la crisis sanitaria sigue causándoles innumerables perjuicios.
Esta vez la ‘sorpresa’ de la EAAB fue la suspensión de las obras de mitigación que venía desarrollando en este sector, trabajos que cesaron sin ninguna razón o explicación aparente, aún por encima del compromiso asumido en la reunión celebrada el pasado 12 de noviembre ante la comunidad y las mismas autoridades municipales y departamentales.
“Esa es la muestra de cómo el municipio de Soacha se ha dejado manejar por la EAAB, porque ellos vienen acá y dicen una cantidad de cosas incoherentes, cuando la realidad es otra. Además, las autoridades locales dicen exactamente lo mismo, que van a hacer o que van a poner, pero en realidad no pasa nada. En la reunión de noviembre pasado se dijo que iban a poner a funcionar dos motobombas para evacuar toda el agua reposada, sin embargo hoy vemos que sólo hay una motobomba (que por cierto no sirve) y el agua sigue reposada mientras los olores son insoportables. Por si fuera poco, la EAAB dice que esa obra es de una magnitud inmensa, pero la verdad es que es imposible aceptar que algo tan elemental como eso no se pueda hacer en un tiempo corto, y por el contrario sí se ponga a la comunidad en alto riesgo. Es inconcebible que para desviar un pequeño riachuelo en un cañito se invierta tantísimo tiempo”, explicó Rafael Rodríguez, Presidente de la JAC de Nuevo Colón.
Rodríguez recordó cuáles han sido las dificultades que han tenido que afrontar por culpa de la obra, entre las más relevantes están las inundaciones, la humedad en las casas, (que están invivibles), y por supuesto las actitudes de la EAAB, que como lo comentan los mismos vecinos, se han molestado con ellos porque supuestamente ‘molestan mucho’.
“Desde que empezaron los trabajos la obra ha avanzado excesivamente despacio y con el paso del invierno se ha represado el agua, a tal punto que nos hemos inundado en más de una ocasión y todo por la falta de prevención de la EAAB. Acá hemos tenido varias inundaciones, mucha gente perdió sus enseres, es una situación bastante difícil”, agregó José Vargas, habitante de Nuevo Colón.
“Estamos muy afectados por la chambonada que está haciendo la EAAB, taparon la vía y nos tienen con ese barro hasta el cuello, hemos pedido el favor de que nos limpien, e incluso acudido a la Alcaldía, pero nada ha sido efectivo. Estamos rodeados de esas aguas de caño y hasta el momento, hoy 22 de diciembre, a nosotros mismos nos ha tocado retirar eso para poder entrar a nuestras casas o permitir que los clientes entren a los negocios”, expresó Orlando Cruz, habitante de Quintanares.
Y es que además de lo que ya se conoce, otra de las grandes inconformidades de los vecinos, que también ayudó a que se haya rebosado la copa de la paciencia de estas personas, es la negligencia con la que ha obrado la EAAB, pues anteriormente se justificaba en el invierno para no trabajar, pero ahora que hay tiempo seco simplemente suspendieron la obra:
“Antes porque había mucho invierno y los ingenieros no podían trabajar así. Ahora estamos en verano y el tiempo es propicio para avanzar en la obra, pero lo que vemos es que no se está trabajando. El colector está colapsado de agua, es agua que lleva mucho tiempo allí y puede ocasionar perjuicios en las personas, más de los que ya han ocurrido”, indicó Régulo Cortés.
“Le quiero decir a los señores alcaldes entrante y saliente, que no se dejen manipular de la EAAB, porque ellos hacen lo que quieren y los que estamos pagando las consecuencias somos los miembros de la comunidad. Lo peor es que no hay una explicación lógica por la cual hayan parado las obras, simplemente no quieren aceptar que esa obra se puede agilizar en época de tiempo seco, sin damnificar a las personas. Estos días han sido de verano y aún así no han sido capaces de trabajar como debe ser”, concluyó Rodríguez.
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