Los foto comparendos
El avance de la ciencia y la tecnología en esta época llamada moderna va superando los límites previstos y como tal ha sido aplicada en todos los campos. Las comparenderas electrónicas, cámaras de video y sensores de velocidad son las nuevas herramientas que desde hace algunos meses se vienen implementando con la finalidad de registrar las infracciones que cometen los conductores en las diferentes vías de la ciudad, especialmente en Bogotá D.C.
La falta de planificación en la construcción de una ciudad moderna que a futuro no cause problemas, es una situación que no puede esconder su realidad. Por otro lado, el ingreso de miles y miles de vehículos particulares que salen a diario de los concesionarios a formar parte del pesado tráfico urbano es inminente, sumado a la falta de zonas especiales de parqueo o parqueaderos con la finalidad que mientras sus conductores realizan sus trabajos y gestiones, sus automotores permanezcan en un lugar seguro y adecuado.
Por otro lado es importante resaltar el alto costo que tiene el servicio de parqueadero, especialmente en la ciudad de Bogotá. Se puede asegurar que el uso de este servicio se ha convertido en un privilegio debido a dos razones muy comunes: la primera, para encontrar un cupo dentro de un parqueadero es una lotería, y eso tomando en cuenta que el vehículo no sea grande porque para esta clase de automotores no se encuentra parqueo a ningún precio, y segundo porque existiendo el cupo es muy importante contar con el bolsillo, ya que en la mayoría de los casos el precio por minuto es de hasta $95 pesos.
Como para concientizar esta situación podemos señalar el siguiente ejemplo: si te demoras una hora en compartir con tus amigos un almuerzo corriente de $4.000 pesos, el costo que debes asumir por el servicio de parqueadero es de: $5.700 pesos, es decir, que vale más el parqueadero del automóvil que el mismo almuerzo; con este análisis sacamos la conclusión que cuatro horas de este servicio equivalen a un salario mínimo diario legal vigente, razón por la que manifiesto que este servicio se ha convertido en un privilegio para los colombianos.
Los Foto Comparendos consisten en que si es cometida una infracción por el conductor, el agente de tránsito sin necesidad alguna de solicitar los documentos, únicamente realiza un registro fotográfico y con los datos de la placa del vehículo reporta la infracción al organismo correspondiente y este le notifica al propietario del vehículo para que efectivamente pague la multa, so pena de no permitirle en lo posterior trámites de tránsito hasta que no se tenga el paz y salvo correspondiente.
La medida es buena y mala; buena en el sentido de que se debe tener mayor precaución porque hoy en día no es necesario que se encuentre la autoridad presente para que le imponga el comparendo, lo que no permite una relación directa de reclamo o soborno; mala porque no existen la cantidad de parqueaderos para no cometer las infracciones y de igual manera al prestar el carro a un amigo, vecino o familiar, es un alto riesgo que por algún descuido este favor termine con una cuenta de comparendo en el tránsito.
Si recordamos años atrás cuando los vehículos se encontraban estacionados en lugares no permitidos, se declaraban en abandono y por consiguiente eran conducidos en grúa a los patios de tránsito, lo que generaba muchos más inconvenientes que los actuales; lo grave de la situación actual es que con las cámaras de las foto multas no existe poder humano con el que se pueda reclamar a los agentes sobre las faltas cometidas; en el mínimo descuido del conductor, cuando menos se imagina, está la foto y estuvo la multa.
Varios recursos se han presentado a los diferentes organismos del Estado sobre la legalidad de esta práctica; todos han sido infructuosos ya que la Corte constitucional declaró que las “foto multas” se encuentran dentro del marco de la legalidad, ya que la aplicación de los medios tecnológicos no desconoce los principios constitucionales.
Lo bueno sería que así como cada día se inventan, practican y aplican leyes para que se sigan pagando multas, de igual forma estas se reflejen en obras y servicios de interés común. El abandono en el que se encuentra la malla vial es visible, falta de puentes peatonales en donde la comunidad arriesga la vida, semaforización, entre otras ,son las obras que igual se deben construir en una sociedad moderna lógicamente aplicada a la tecnología.
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