Los sensacionales del deporte se niegan a desaparecer
Son dos soachunos raizales, amantes de los medios de comunicación. Caucali estudió locución deportiva en el Colegio Superior de Telecomunicaciones, mientras que el flaco, desde niño a la hora del descanso en el Colegio Integrado, empezó sus pinitos como narrador deportivo.
El papá de las transmisiones deportivas, Jaime Bravo León (q.e.p.d), los llevó a cubrir la primera B cuando existía Soacha F.C. Caucalí inició como voz comercial, ¨Turbay relevaba en el relato a otro grande de los medios: Óscar Duque. Así paso el tiempo hasta que Jaime Bravo compró un espacio en radio Cordillera que se transmitía desde el Campín. “Una vez fui al estadio, a copa libertadores, jugaba el equipo de los amores, Millonarios, contra un onceno paraguayo. Jaime Bravo estaba furiosísimo porque no llegaba el narrador, cuando de pronto aparece el famoso volcán de Manizales, le sintió tufo, entra en cólera el Pony León y le dice ‘hoy no va’. Jorge Hernando Rodríguez Sierra, a la cabina. Que emoción tan hermosa, terminé en el Campín narrando al equipo de mi alma, un torneo internacional, y al final del partido Jaime bravo me felicitó y así quedé enganchado de una con el combo”, sostuvo ‘Turbay’.
Caucalí ha sido más afortunado, empezó como voz comercial y terminó de comentarista. Viajó por todo el país acompañando el equipo del municipio, sin embargo ambos colegas concluyen que en esta profesión la envidia juega un papel protagónico, pero ante las adversidades se lograron sobreponer, convirtiéndose en un referente obligado para muchos.
Los juegos deportivos de 2004 en Soacha fueron definitivos en la carrera de estos dos personajes. La opinión pública los catalogó como los mejores de la región, por encima de reconocidos locutores; su pasión por el fútbol no tiene precedentes, siete torneos de la primera B, 10 carreras atléticas internacionales, tres carreras ciclísticas, cuatro hexagonales del municipio y cualquier cantidad de torneos en Soacha, están en el palmarés de ‘Los sensacionales del deporte’, un equipo con talento e identidad local. Por su grupo han pasado muchos, el más significativo es Roberto Hernández Jr., narrador deportivo de grandes ligas: Caracol, la Z, Radio Santafé y la W, entre otras. Robert, como le dicen cariñosamente, aprecia a estos muchachos, le duele que no tengan oportunidades y asegura que se están desperdiciando cuando en Colombia ya no hay relatores ni comentaristas de este estilo.
Desde 2004 hasta 2010 trabajaron en la emisora local, pero lastimosamente el cobro de la tarifa para los partidos de fútbol los sacó del negocio, además la pauta publicitaria en el municipio no tiene identidad, afirman. “Soacha quiere más a las emisoras de afuera que vienen una o dos veces al año, cobran buenos dividendos y se van; en cuanto a lo local es triste ver que cobren como si fueran medios comerciales, cuando uno realmente sabe que la audiencia acá se perdió por lo mismo, quienes están en su mayoría no son del municipio, no conocen, se vio en la carrera atlética pasada, colocaron a gente que no sabía dónde estaba parada”.
Jorge Rodríguez alterna su tarea de relator deportivo con el triciclo que maneja vendiendo refrescos Vikingo, ‘los que te refrescan de Lunes a Domingo’. Edgar Hernando Caucalí trabaja en una empresa como soldador, pero siempre sacan tiempo para narrar internamente torneos barriales.
Los que saben de fútbol aseguran que este par de muchachos son insignia en la profesión, Soacha esta agradecida por sus voces que han alegrado la historia del deporte local. Por su reconocimiento, sus méritos y su perseverancia, no se pueden desaparecer. ¡Soacha los necesita¡.
* La calidad de las fotos es la original
Siga a Periodismo Público en Google News. Suscríbase a nuestro canal de Whatsapp