“Señor periodista, hágase bachiller”: Jaime Garzón

Posted on 30 de octubre de 2014 by Periodismo Público

Un 24 de octubre hace 54 años nació uno de los colombianos más recordados en la memoria política de Colombia: Jaime Garzón, un brillante analista y crítico político que fue vilmente asesinado por hablar sobre la realidad colombiana y por creer en el diálogo y el humanismo como único camino hacia la paz.

Yo lo recuerdo en Zoociedad TV, en ¡Quac¡ El noticiero, pero nunca logre asemejarlo en su papel de Heriberto de la calle, aún en esos años yo no tenía conciencia política, pero nunca olvido que ver esos programas era el plan familiar del fin de semana y mi padre, que era policía y mi mama oriunda del Tolima, vociferaban y reían cuando veían a Godofredo Sínico Caspa y a Dioselina Tibaná.

La terapia de Jaime no era sencilla, generar reflexión por medio de la risa y el humor simplemente hacia parte de su inteligente forma de mirar el mundo y de su personalidad, aunque nunca lo vi en persona. Cuando veo y escucho sus palabras en todos los medios actuales, pienso en un devorador de periódicos y de los medios de la época. ¿Qué habría sido si hubiese vivido la internet y los medios como los vivimos hoy? ¿sería político o periodista, o como muchos hoy en día, periodistas con intereses políticos?

También hace varios años en un festival del Malpensante observaba un homenaje a su memoria y lo que me di cuenta es que muchos de aquellos que dejaban sus palabras en el lienzo lo recordaban como un payaso que hacia chistes en televisión, en ese momento me di cuenta que él era más que eso, fue un profeta que anunciaba la tragedia que sucumbió al país en el terror del paramilitarismo en los años posteriores a su muerte. Pero como enseñaba él mismo con su gran amor por la música salsa y como dice la canción “de verdad soy un payaso, pero qué le voy hacer, uno no es lo que quiere, si no lo que puede ser”.

Hoy el periodismo debe reflexionar mucho con personajes como Inti de la Oz, la reportera yupi, posmoderna, espontánea, ingenua e ignorante que pasó efímeramente por el periodismo y quien se le media a cubrir las distintas secciones del noticiero, aunque no tuviera ni idea de los temas que le encargaban.

Hoy sabemos que Jaime Garzón no solo lo mataron por cuestionar el establecimiento, hacer periodismo critico o defender los Derechos Humanos, en la actualidad cualquiera que haga labores humanitarias, busque el diálogo y la paz, ya es considerado enemigo de los señores de la guerra que comulgaban con el paramilitarismo, hoy en día convertido en bandas criminales que están rondando el municipio, como se ha venido anunciando en los medios locales.

El rotundo vagabundo, aunque estuvo cerca del poder, siempre lo cuestionaba, hizo campaña con Pastrana y con Gaviria, dos orillas distintas, pero nunca se encasilló en un partido o una idea, porque como nos enseñó él, somos un país diverso y pluricultural y en donde “nadie podrá llevar por encima su corazón a nadie, ni hacerle mal en su persona, aunque piense y diga diferente”, pero aun así lo mataron y su crimen está impune, pero queda el recuerdo de quien revolucionó este país por medio de una sonrisa.