A tomar agua del río Bogotá, se puso en marcha nueva obra en la PTAP Tibitoc
Con la modernización de la Planta de Tratamiento de Agua Potable – PTAB Tibitoc, Bogotá tendrá suministro de agua para 33 años.
Lo que dijo el alcalde Carlos Fernando Galán y la gerente de la Empresa de Acueducto, Natasha Avendaño, es que con la culminación exitosa de las obras de modernización y optimización de la PTAP Tibitoc, una infraestructura clave que se surte del río Bogotá, y junto al sistema Chingaza, se asegura el suministro de agua sin el temor del racionamiento.
“Gracias a que hoy entra en operación el séptimo tren de la planta de Tibitoc, podemos decirle a la ciudad que tenemos garantía de agua potable para los próximos 33 años en Bogotá, de aquí al año 2058 la ciudad no va a tener dificultades gracias a la obra que se ha hecho aquí de optimización de la Planta de Tibitoc”, aseguró el alcalde Mayor Carlos Fernando Galán.
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Con la entrada en operación del séptimo y último tren de tratamiento, planificado dentro del proyecto de optimización de la Planta Tibitoc, se podrán tratar 10,5 m³/s de agua para responder a la creciente demanda del recurso en Bogotá y los municipios aledaños.
Por su parte, la energización de las subestaciones posibilita el uso de tecnología moderna que permite ajustar el funcionamiento de los motores de acuerdo con la demanda, optimizando el consumo energético y garantizando una operación más flexible, segura y con menores costos operativos
“Estas dos obras son claves para lograr una planta más eficiente, confiable y sostenible. La activación del séptimo tren incrementa la capacidad hidráulica y mejora la confiabilidad, reduciendo la dependencia del sistema Chingaza y fortaleciendo la resiliencia ante fenómenos climáticos extremos” sostuvo Natasha Avendaño, gerente de la EAAB.
Con la modernización de la Planta Tibitoc, la ciudad fortalece la seguridad hídrica al contar con una mayor capacidad de tratamiento y una operación más eficiente contribuyendo a la mitigación de los impactos de la sequía, turbiedad extrema o variaciones en la demanda. Además, la reducción en el consumo de energía por metro cúbico tratado conlleva menores costos operativos.
Foto: EAAB