Gobernación busca solucionar problemas del acueducto La Mesa-Anapoima

Posted on 23 de abril de 2016 by Periodismo Público

Después de 10 años, los contratistas no cumplieron y las obras están abandonadas. El Gobernador socializará con las comunidades.

En cumplimiento de la mesa de trabajo convocada por Procuraduría General de la Nación, en la que participaron la Contraloría Departamental, la CAR, los alcaldes y la comunidad en general, el gobernador de Cundinamarca, Jorge Emilio Rey Ángel, socializó la postura de la Gobernación de Cundinamarca en relación con el proyecto ‘Acueducto La Mesa-Anapoima’.

Según explicó el mandatario, es necesario adelantar, a la mayor brevedad, un serio proceso de socialización con las comunidades para dar a conocer las fases del proyecto, así como concertar los temas sensibles y avanzar con la ejecución de la obra, que beneficiará a los habitantes de la provincia del Tequendama, principalmente.

Asimismo, el Gobernador se comprometió a destinar los recursos necesarios para que el municipio de Bojacá cuente con la asesoría técnica necesaria en materia ambiental. De esta forma se le dará viabilidad al proyecto, especialmente en el proceso de perforación del pozo profundo.

“La administración departamental le planteará al Acueducto de Bogotá que se interconecte al proyecto desde Bojacá, con lo que se garantizaría una segunda fuente de agua, permitiendo brindar servicio a los acueductos rurales y urbano de Bojacá, así como al de La Mesa–Anapoima”, manifestó el gobernador Jorge Rey.

En este sentido, también se comprometió a socializar el proyecto el próximo 6 de mayo, acto en el que participarán, además de las comunidades afectadas, las autoridades nacionales, departamentales y municipales. Se trata de auspiciar un solo escenario para presentar los diferentes puntos de vista frente a la iniciativa.

Por su parte, el contralor de Cundinamarca, Ricardo López Arévalo, anunció la creación de una veeduría articulada a esta obra, la cual permitirá que cerca de 17 mil pobladores de Tena, La Mesa, Anapoima y, especialmente de Bojacá, accedan de manera permanente al servicio de agua, del cual carecen desde hace más de 10 años.