Tres ‘odontologías’ fueron cerradas en Bogotá: pacientes corrían peligro por malas prácticas
Lo que parecía una jornada más de control en el centro de Bogotá terminó revelando una realidad tan insólita como preocupante.
A simple vista parecían carretas comunes, instaladas entre el flujo constante de peatones y vendedores de la Carrera Séptima y San Victorino. Pero al acercarse, lo que encontraron las autoridades fue mucho más preocupante: consultorios de odontología improvisados, atendidos por personas sin ningún tipo de formación médica y con procedimientos realizados a plena luz del día.
En una intervención realizada en las últimas horas por la Secretaría Distrital de Seguridad, la Policía Metropolitana de Bogotá y la Alcaldía Local de Santa Fe, fueron desmantelados tres de estos puntos ilegales, donde se ofrecían tratamientos como limpieza dental y brackets por precios que partían desde los $20.000.
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Dentro de las carretas se hallaron jeringas, cauchos para brackets, guantes y otros insumos propios de la odontología, todos manipulados sin ningún tipo de control sanitario. La escena evidenció un riesgo latente para la salud pública, en un escenario donde la informalidad se cruza con la necesidad y la desinformación.
Pero no fue lo único. Mientras se desarrollaba este operativo en San Victorino, en otro punto de la Carrera Séptima, un grupo de uniformados decomisaba 329 libros piratas listos para la venta. Sin facturas ni respaldo legal, los ejemplares eran ofrecidos a precios bajos en el espacio público, afectando directamente a la industria editorial y promoviendo el delito de la piratería.
Este tipo de comercio ilegal no es nuevo en el centro de Bogotá. En operativos anteriores, las autoridades también han encontrado barberías clandestinas funcionando en espacios públicos, donde se ofrecen cortes de cabello y afeitadas sin ningún tipo de habilitación sanitaria ni control sobre los elementos que se usan. Actividades que, como en el caso de los consultorios, exponen a los usuarios a riesgos de infecciones y problemas de salud, además de incentivar la ocupación indebida del espacio público.
La jornada también dejó la incautación de 22 armas blancas y el traslado de tres personas al Centro de Traslado por Protección (CTP), por comportamientos que alteraban el orden público.
“Con estos operativos se logra un control territorial sobre estos sectores del centro de Bogotá. Se logran resultados importantes y seguiremos trabajando para recuperar el espacio público para la ciudadanía”, aseguró el coronel Luis Carlos Torres, comandante de la estación de Policía de Santa Fe.
Estas acciones hacen parte de la estrategia Sépti+, una apuesta del Distrito para intervenir y transformar integralmente este corredor vial, uno de los más emblemáticos de la ciudad. En semanas anteriores, las autoridades ya habían incautado medicamentos vencidos, prendas militares y botellas de licor vacías listas para ser reutilizadas fraudulentamente.
Además del control policial, Sépti+ contempla acciones conjuntas con entidades como el Jardín Botánico, el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) y la Defensoría del Espacio Público, que avanzan en la siembra de plantas, la reparación de andenes y la sensibilización ciudadana para cuidar este espacio común.
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La lucha por recuperar el centro de Bogotá se libra metro a metro, entre carretas, libros piratas, barberías clandestinas y consultorios que nunca debieron existir. Una batalla que no solo busca imponer el orden, sino garantizar la seguridad, la salud y la dignidad en el corazón mismo de la capital.
Foto: Secretaría de Seguridad y Freepik